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Facundo Castro no se fue a Italia, entrenó ayer en el complejo Arsuaga y será titular frente a  Atenas en el debut del torneo Apertura

Facundo Castro se despertó ayer en su domicilio de Jacinto Vera. Ya tenía la valija pronta y llamó a Óscar Bentancur, el primo de su representante, con quien debía viajar rumbo a Italia para firmar su contrato con el Brescia, para decirle que ya se iba para el aeropuerto. Grande fue su sorpresa. “¿Cómo? ¿No te llamó Pablo?”, le preguntó Óscar y agregó que la transferencia se había caído.

En realidad, ya en la noche del lunes Pablo Bentancur le había avisado a los directivos violetas que la situación se había complicado y por la mañana se enteraron de que se había frustrado la transferencia.

Castro no entendía mucho lo que sucedía, pero enseguida comenzó a recibir llamadas de sus compañeros de Defensor Sporting, del técnico Eduardo Acevedo y del gerente Richard Marchelli.

“Venite para la práctica enseguida, que el fin de semana vas a ser titular”, le dijo Acevedo. Y mientras Facundo no llegaba reunió al grupo y le explicó que el volante iba a necesitar el apoyo de todos para superar el mal momento. En realidad, el pedido del entrenador no era necesario, porque la mayoría ya se había comunicado con su compañero. Y cuando llegó todos le hicieron bromas. Y le dijeron que tenía que pagar un asado porque se había despedido el día anterior y les había hecho creer a todos que se iba.

Recién cuando Castro ya estaba en viaje hacia el complejo Arsuaga, donde ayer entrenaron los violetas, recibió el llamado de su representante Pablo Bentancur explicándole que Brescia había cambiado las condiciones y el pase se había caído. Seguramente, el empresario estaba muy atareado con la situación de Diego Polenta, dado que en principio iban a viajar juntos hacia el viejo continente.

“Cuando una ilusión se cae, es bravo. Hablé con él temprano, le dije que arrancaba con los tácticos y que él estaba adentro”, contó Acevedo. “Todos hablamos con él, lo necesitamos mucho. Cuando me avisaron que se iba estuve como una hora shokeado, porque no tengo otro con las características de Facundo. Fue el primer día, pero en la cancha me respondió muy bien”, dijo el técnico. Es que Castro ayer compartió la ofensiva con Germán Rivero en el trabajo táctico que ordenó Acevedo ayer por la mañana.

Matías Cabrera también habló con Facundo y le contó su propia experiencia, cuando una vez estuvo a punto de irse a Cagliari, su novia renunció a su trabajo, su familia le hizo una despedida y luego el pase no se hizo. “Facundo sabe que tiene el apoyo de todo el grupo”, dijo Matías.

Castro reconoció tras la práctica que estaba bastante molesto y desilusionado, pero no quiso hablar en nota porque así se lo pidió su representante.

Afuera de la cancha lo esperaba el presidente Daniel Jablonka, quien había ido exclusivamente al complejo Eduardo Arsuaga para hablar con él y también expresarle su apoyo.