El 2016 trajo a un Juan Ramón Carrasco renovado desde lo conceptual. En los primeros partidos de Copa Libertadores no solo se preocupó del arco de enfente, sino del propio y justamente porque no recibió goles ante Universidad de Chile fue que River Plate clasificó a la fase de grupos.

Sin embargo, en el torneo local no está cosechando buenos resultados: en cuatro fechas su equipo aún no ganó. Tanto que se habla de rotación por estas horas luego de la aplicada sin éxito por Nacional, "JR" también la ha hecho y consultado al respecto salió a bancar a Gustavo Munúa. Pero a su vez dejó un concepto realista que es una muestra más de su cambio conceptual. "Debemos apostar primero a lo local para poder estar en otra copa", tiró Carrasco. Y en estos momentos le urge a River comenzar a sacar puntos para ello. Sabe que ser campeón de la Libertadores es una utopía. Incluso pasar de fase será difícil, pero River se aseguró un ingreso superior a los dos millones de dólares por estar en la Copa. Por eso el objetivo terrenal del darsenero debe ser el torneo local. Jugar bien es tan importante como ser realista y hoy Carrasco intenta ambas cosas.

El Análisis