BOLIVIA
Víctor Hurtado se fue a Cochabamba para estudiar biología y terminó convirtiéndose en árbitro profesional.
Conmovió a todos. Al que le gusta al fútbol y al que nunca observó un partido. Con 32 años, el árbitro boliviano Víctor Hurtado sufrió un paro cardiorrespiratorio en el campo de juego y antes de llegar al hospital, falleció
De todas maneras, su historia seguramente quedará grabada a fuego en el pueblo boliviano y precisamente 48 horas antes de su deceso la había contado.
Nació en Yapacaní, Santa Cruz, y a los cuatro años quedó huerfano de madre. Su padre lo motivó a estudiar mientras lo ayudaba a trabajar en el campo donde ganaba 20 pesos bolivianos por día (aproximadamente $ 100 uruguayos).
Además, Hurtado era fanático del fútbol y jugaba de puntero izquierdo, pero a los 18 años sufrió una rotura de meniscos que lo obligó a retirarse de las canchas y encontró una manera de seguir conectado siendo árbitro.
“Como dirigía bien, los delegados de los otros equipos me decían: Hurtado, arbitrá para nosotros y te vamos a pagar. Me empezaron a dar 20 bolivianos por partidos, entonces los 100 pesos que yo ganaba en una semana de sol a sol, (arbitrando) lo hacía en un domingo. Era algo maravilloso para mí”, contó.
Se mudó a Cochambamba a estudiar biología, pero la pasión por el arbitraje fue más fuerte y se anotó en el Colegio de Árbitros.
Entre risas, contó la anécdota de cuando dirigió sin ser titulado y casi genera un problema grande. “Me mostré en un partido sub-19 entre Wilstermann y Pelota de Trapo, yo recién llevaba tres meses en el Colegio de Árbitros. Lo hice bien y en la semana siguiente me dedignaron para arbitrar en la B. Me criticaron y decían: ¿Por qué Hurtado si recién lleva tres meses? Mario López, de la comisión de designación, me preguntó si era árbitro y le respondí que sí, pero que no era titulado. ‘Hijo, por qué no dijiste, mirá lo que has causado, me dijo’”.
Su carrera fue en pleno ascenso y era uno de los árbitros con más designaciones en el certamen. De hecho el día de su fallecimiento estaba dirigiendo su partido número 13 en el semestre.