CRISIS SANITARIA

Los equipos del fútbol argentino todavía están lejos de volver a entrenar. De hecho, la mayoría de los clubes de la vecina orilla lo hacen a través de la aplicación Zoom y en sus hogares, pero hay dos equipos que intentan cambiar esa realidad.

Se trata de Boca Juniors y Defensa y Justicia y su intención es venir a Uruguay para poder entrenar y así empezar a tomar ritmo de cara a la vuelta de la Superliga y también la Copa Libertadores.

Que ambos equipos disputen Copa Libertadores no es un detalle aleatorio, pues si su intención se concreta se espera que se sumen los otros equipos que disputan el certamen continental: River Plate, Racing y Tigre.

El equipo xeneize y el Halcón comenzaron a hacer las averiguaciones pertinentes, teniendo en cuenta que en Uruguay sí podrían comenzar con los trabajos al estar habilitada la práctica del fútbol.

Según confirmaron a Ovación fuentes de la AUF, a la casa del fútbol no llegó ningún pedido oficial desde la AFA y se entiende que esta debería ser la vía correcta. Sin embargo, tampoco se descarta que pueda ocurrir, aunque la AUF oficiaría simplemente como intermediaria, pues la decisión final la deberá tomar el gobierno uruguayo.

Entonces, la duda está en cuál será la actitud a tomar por parte de las autoridades nacionales, especialmente las de la salud. Y aquí hay varios aspectos a tener en cuenta.

En primera instancia, que las fronteras están cerradas y solo pueden ingresar al país personas que tengan la residencia en Uruguay. Por esto debería aprobarse un permiso especial para que las delegaciones deportivas pudieran llegar.

A su vez, se mantiene firme la posición del gobierno de cumplir con los protocolos correspondientes. Esto implica que los planteles que arriben a Uruguay tengan que pasar siete días de cuarentena y un doble hisopado, por lo que deberían superar un test antes de ingresar al país y luego otro a la semana para comenzar a entrenar en caso de que no haya positivos.

De cualquier manera, esto no sería impedimento porque los equipos argentinos no tienen todavía ni siquiera una fecha posible de regreso a los entrenamientos, por lo que una semana de espera no les cambiaría nada en lo inmediato pero sí les permitiría tener un día concreto para poder volver al trabajo en conjunto.