Esta semana, Montevideo Wanderers concretó una idea que la dirigencia tenía en mente y el 2016 será un año de cambios en sus instalaciones.

En Asamblea Extraordinaria, los socios del club aprobaron la venta de la sede de calle Agraciada y el dinero se reinvertirá en obras que favorezcan al club.

La vieja sede estaba prácticamente en desuso salvo algunas oficinas por lo que generaba pérdidas. Tras la Asamblea se resolvió venderla a la empresa ARCA en más de US$1.000.000.

Con este dinero, se sostendrá el "Proyecto Viera", un plan de reformas para el estadio del club.

Los dirigentes quieren renovar la concesión del predio y para lograrlo deben realizar una serie de reformas que exige la IM. La fachada debe ser renovada y se debe reacondicionar el interior. Además se volverán a hacer los baños de tres tribunas y el vestuario visitante.

Sobre la calle Atilio Pelosi se harán oficinas administrativas del club y sala de reuniones.

Otro de los puntos fuertes del proyecto es la iluminación. Se planean colocar cuatro torres para que se puedan disputar partidos nocturnos. Además daría la posibilidad de alquilar el estadio para eventos musicales lo que generaría ingresos extra.

Uno de los problemas que restan resolver es una deuda con la Intendencia que planean que sea exonerada.

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