Los clásicos previos a los torneos suelen condicionar el futuro; el de mañana no parece ser la excepción.

Cualquier jugador que disputó un clásico no oficial entre Nacional y Peñarol sabe que esos partidos poco tienen de amistosos. Es que son encuentros en los que se juega mucho más que un partido de preparación para el torneo venidero.

Históricamente se juegan en verano, aunque han habido excepciones, como el encuentro de mañana que se disputará en pleno invierno. A su vez, los clásicos amistosos se juegan sin interrupciones desde 2004 a la fecha y obedecen, en general, a la organización de empresas privadas. Pero a lo largo de toda la historia se han registrado clásicos amistosos.

En la tabla histórica de este tipo de partidos desde que se instaló el profesionalismo en el fútbol uruguayo (1932) registra 79 clásicos no oficiales disputados, con 29 triunfos para Nacional, 21 de Peñarol y 29 empates, donde no fueron contabilizadas las definiciones por penales para determinar al ganador, ya que si bien es una práctica común en estos tiempos, hubo varios encuentros -como los de la Copa Montevideo, que la llegaron a jugar hasta ocho equipos- en los que no hubo desempate.

Algunos resultados de clásicos amistosos han determinado, incluso, la salida de entrenadores. El caso más reciente, que estuvo envuelto de polémica, fue el cese de Pablo Bengoechea de Peñarol luego de perder contra Nacional 3-1 en el último registro de clásico amistoso que hay. Lo más llamativo de ese momento fue que apenas seis días antes Peñarol había hecho una buena presentación clásica, en el partido que terminó 1-1 y que luego ganó por penales.

Algo similar sucedió con Gustavo Matosas, que perdió el clásico de verano, quedó en el cuerda floja y lo echaron en la cuarta fecha del Clausura.

En Nacional se han vivido los clásicos amistosos con mayor calma y tranquilidad, al menos en los más recientes.

El de mañana será un clásico importante para Peñarol, para empezar con confianza el Clausura y para que Leonardo Ramos se afirme en la conducción, mientras que para Nacional servirá para levantar el ánimo tras la eliminación de la Copa Libertadores.

INTERACTIVOJUAN PABLO ROMERO