El volante de los de Sayago sufrió un golpe en la sien al chocar con un rival, estuvo internado y la primera tomografía mostró un cuágulo que lo asustó mucho, pero era una falsa imagen. Ya está en su casa y mañana vuelve a entrenar

"Por algo pasarán estas cosas, será que luego vendrán las buenas", dice Agustín Gutiérrez ya instalado en su casa de Malvín Norte. El futbolista de Racing chocó en el partido que los de Sayago disputaron en su cancha frente a Danubio el sábado pasado y estuvo internado hasta anoche. El volante se refiere obviamente a su mala suerte, cabe recordar que arrancó el pasado torneo Apertura anotándole cuatro goles a Danubio en solo media hora, pero después se fracturó el quintometatarsiano y tuvo que ser operado dos veces lo que lo tuvo meses lejos de las canchas.

El sábado arrancó el torneo Clausura con ilusión, pero chocó con De Los Santos, no volvió a jugar el segundo tiempo y terminó internado en la Asociación Española. "Yo traté de dar un pase de cabeza, pero el jugador de Danubio venía corriendo con mucho impulso y su frente chocó contra mi sien. En ese momento me levanté, los médicos no entienden cómo no perdí el conocimiento, pero quería ver a mis compañeros y con el ojo izquierdo no veía nada. En el vestuario seguía igual y me sacaron", relató Gutiérrez sobre la lesión que sufrió en el debut de Racing en el Clausura.   

Menudo susto de llevó cuando la tomografía que le hicieron mostró una mancha que podía ser un cuágulo. "Imagináte, estaba como loco. Por suerte, la segunda tomografía demostró que lo de la primera había sido una falsa imagen debido a la gran hinchazón que tenía en el cráneo. Por suerte, anoche me dieron el alta ya estoy en mi casa y el susto pasó. Hoy tengo que hacer reposo, pero mañana ya vuelvo a entrenar y espero estar para el partido del fin de semana", dijo ilusionado.  

RacingSilvia Pérez