OVACIÓN EN BRASIL

Casi no hay carteles alusivos al torneo en Belo Horizonte; la ciudad tendrá hoy un partido del Brasileirão.

Cuando la selección arribe al Aeropuerto Internacional de Belo Horizonte esta mañana, no va a encontrar ningún cartel alusivo a la Copa América. Tampoco en el recorrido al Hotel Ouro Minas, donde la delegación celeste se hospedará hasta el lunes, después de debutar contra Ecuador el domingo a las 19.00 en el imponente Mineirão.

En la ciudad tampoco hay propaganda del máximo torneo de selecciones del continente. Nada de nada. Ni en las calles, ni en las veredas, ni en las casas. Recién cuando el equipo de Ovación llegó al estadio, se empezó a percibir algo del clima copero: grandes carteles que rodean al escenario, personas de mantenimiento ultimando detalles en los alrededores (colocando luces, regando plantas y árboles, limpiando) y muchos periodistas en la búsqueda de su acreditación.

“En parte es responsabilidad nuestra. Por nuestro calendario. Hoy y mañana hay partidos por el Brasileirão; así es difícil de enchufarse”, reconoció el periodista brasileño Lucho Silveira.

Tan cierto es que la gente de Belo Horizonte habla más por estos días de Atlético Mineiro y Cruzeiro, que de la propia Copa América.

Es que ayer los azules visitaban a Fortaleza, mientras que hoy el Galo será local de São Paulo, pero en el Parque Independencia.

La rivalidad entre estos dos equipos es muy grande. A tal punto que un fanático de Cruzeiro, encargado de la tienda oficial de indumentaria del club, tiene una camiseta de Giorgian De Arrascaeta y pretende tener su firma, pero cuando se enteró que Uruguay entrenaría en el complejo deportivo del archirival, rápidamente desestimó su pensamiento. “Ni loco voy a ese lugar”, afirmó.

“Yo me enteré que empezaba la Copa América por los anuncios de televisión”, dijo, con un portugués algo cerrado, Treice, que trabaja manejando un Uber. “Reconozco que no soy muy futbolera”, agrega como para atajarse.

Lo cierto es que en Belo Horizonte no se percibe clima de Copa América. Quizás con la presencia de Suárez y Cavani, el interés empiece a asomar.