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No se va, Bernie no se va...

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La Fórmula Uno cambia de dueño. Foto: EFE

Ecclestone vendió en una cifra multimillonaria los derechos de la máxima categoría del automovilismo, aunque anunció que seguirá ligado durante dos o tres años más.

El coloso estadounidense Liberty Media compró los derechos comerciales de la Fórmula 1 que eran propiedad del británico Bernie Ecclestone, quien seguirá ligado a la máxima categoría del automovilismo mundial.

El emporio de comunicaciones liderado por John Malone, de 75 años, pagó una cifra de entre 6 y 8 mil millones de dólares para comprar los derechos de la F1, según informó la cadena estadounidense Cnbc. El reporte sostiene que Ecclestone ocupará un rol como administrador delegado, mientras que Chase Carey fue nombrado presidente de la categoría.

El propio Ecclestone, de 86 años, había anticipado a la prensa estadounidense que seguiría relacionado a la F1 "por dos o tres años más" incluso tras acordar la cesión de los derechos comerciales de la máxima categoría del automovilismo mundial.

El directivo británico indicó que mantendrá un rol en la gestión y supervisión como director ejecutivo mientras la F1 inicia una nueva era con sus nuevos propietarios.

La operación, según los reportes, se completará antes del primer trimestre de 2017, cuando Malone (acérrimo rival del australiano Rupert Murdoch) asumirá el control de la F1. Esto ocurrirá, según Cnbc, luego que Libertry Media pague 1.100 millones de dólares al contado, 131 millones en acciones propias y 351 millones bajo la forma de deuda emitida por la propia F1.

El propio Murdoch, recuerda la prensa estadounidense, ya había intentado comprar los derechos comerciales de la F1 pero debió resignarse ante el rechazo de Ecclestone, patrón de la categoría por 40 años. El cambio de propietario se concreta luego que Ecclestone afrontó críticas por la caída de audiencia y por la falta de actualización de la F1, a la que además llevó a países acusados por la falta de respeto a los derechos humanos.

El directivo británico también fue señalado por, supuestamente, repartir injustamente los fondos de la F1 entre los equipos que compiten en el mundial de la categoría. Del otro lado, los defensores de Ecclestone recuerdan que convirtió a la F1 en un negocio de casi 2 mil millones de dólares al año con 400 millones de fanáticos en todo el mundo.

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La Fórmula Uno cambia de dueño. Foto: EFE

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