LA CLAVE
Está muy bien que los responsables de la educación se preocupen por los problemas la enseñanza, pero palabras como las del Director de Planificación de la ANEP no despiertan mayores esperanzas. Dice el Sr. Romano, “llegó el momento de que la clase media acepte que esos bancos, que históricamente se reservó para sí misma, ahora los deberá compartir con los recién llegados”. Otra perla es “la educación es obligatoria para todos, un derecho de todos, y no puede ser pu-ra meritocracia”.