LA CLAVE
La decisión de Laura Raffo, de no aceptar la presidencia de República AFAP, seguir haciendo política y profundizar sobre Montevideo, es un golpe que sacude el tablero. No en lo inmediato, pero sí para el futuro. Hasta ahora las campañas electorales de los partidos de oposición por Montevideo estuvo signada por la improvisación. Pero, como dijo Tomás Linn en su columna del domingo, Raffo estable-ció una estrategia que complicó al FA y adquirió firme visibilidad. Bienvenida esta apuesta a largo plazo.