LA CLAVE
A muchos argentinos recién les “cayó la ficha”. Pensaban que teniendo propiedades en nuestro país, no tendrían problema en venir a pasar sus vacaciones en Uruguay, ya fuera en su casa, su apartamento o su chacra, por las cuales pagan los impuestos y tasas que corresponden a la Intendencia donde se encuentran, además de varios otros gastos conexos. Pero si no se les ocurrió tramitar de antemano la residencia legal, con los trámites consulares colapsados, parece una misión imposible.