@|El tema de la velocidad en vacunar a la población no depende sólo de las entregas de dosis, sino también de los recursos humanos.
De conseguirse una cantidad suficiente de vacunas en entregas rápidas, ¿no se puede poner a vacunar a todo profesional que sepa dar inyectables?
Sé que suena descabellado, pero a veces las “tormentas de ideas” se purifican y salen otras ideas vanas que pasan por otras mentes inquietas y solucionan problemas.
¿Por qué no poner en discusión que dentistas y veterinarios puedan ser recursos humanos para reforzar los puestos de vacunación?
En las pandemias todo vale, incluso la imaginación y la confianza. Hoy el tiempo es oro. Si alguien ladra es señal que se cabalga.