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Subsidios y viáticos

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Palabras del Presidente Vázquez

@|Como es su costumbre, el actual Sr. Presidente de la República pontifica sobre sobre sus antecedentes en cuanto a viáticos y subsidios, poniéndolos en contraposición con los de su compañero de fórmula.

Al igual que cuando el entonces Sr. Vicepresidente de la República enfrentaba “el bullying” más tremendo, según sus propias expresiones, no dudó en indicar que él en su lugar renunciaría, circunstancia a la que sus propios correligionarios lo llevaron a tomar, para así tratar de terminar con el escándalo que presagiaba una próxima derrota electoral.

Ahora que su actual sucesora - cuando emprende esos fructíferos viajes al exterior – decidió adelantarle a su antecesor el “subsidio” de trece mil dólares mensuales, el Sr. Presidente se auto- alaba indicando que cuando él terminó su mandato en la Intendencia Municipal de Montevideo, no cobró el “subsidio” a que tenía derecho, “preocupado por los trabajadores que van a seguro de paro y por seis meses les pagan muy poca plata”.

Dicho esto hace casi dos décadas podría tener cierta verosimilitud, no ahora cuando tenemos cientos de ejemplos en los que a trabajadores se les paga bastante más de seis meses de seguro de paro y no por poca plata, que obviamente salen de nuestros bolsillos y no de los de los de los actuales gobernantes.

Es obvio que al Sr. Presidente le gusta hablar sobre sus logros personales, como le gusta a la mayoría de los seres humanos. Cabría preguntarle, si cuando se postuló para una segunda presidencia pensó más en su “biología” que en quién le acompañaba. Continuando con la interrogante, si la misma fue su decisión personal o le fue impuesta por su partido. En uno, como en otro caso, la misma fue un fiasco y hay grandes síntomas de corrupción a los que una justicia independiente – más allá de eventuales simpatías políticas – debería investigar a fondo.

Los ochocientos millones de pérdida de Ancap, más los trescientos e Pluna, más el agujero negro de ASSE, más la regasificadora, exceden la posibilidad de simples “errores”. La circunstancia de que se “pateen para adelante” contrayendo deuda para pagarlos en el futuro no quita de responsabilidad por estos hechos. Y no vengan con que la deuda es “blanda” porque es a largo plazo y a relativamente bajas tasas de interés. Es deuda y habrá que pagarla, no con el sudor de la frente de los burócratas que la contratan, sino con el del sector privado que seguirá soportando esta carga. Como así la de pagar los combustibles, la electricidad, la salud a los precios más altos de la región, todo ello a cambio de mayor ineficiencia, descontrol y politiquería estatal.

Cabría preguntarle al Sr. Presidente, cómo se autocalifica al haber designado a su hermano, Sr. Jorge Vázquez Rosas como Prosecretario de la Presidencia en su primera Administración y luego como fiel escudero del Sr. Eduardo Bonomi, Ministro del Interior del anterior gobierno del Sr. José Mujica Cordano y que sigue en el mismo cargo en el actual. Su hermano es un auténtico Licenciado, no en Genética Humana, como decía su compañero de fórmula, sí en Enfermería. ¿Lo califica para el cargo dónde se encuentra una de las mayores críticas de la población? ¿Le suena “nepotismo”? Por si alguien le pregunta, le sugiero la versión del diccionario: “Trato de favor hacia familiares o amigos, a los que se otorgan cargos o empleos públicos por el mero hecho de serlo, sin tener en cuenta otros méritos”.

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