@| Con un magnífico y perfeccionado lobby, los “cincuentones” van a conseguir un ajuste de sus futuras jubilaciones. Algo que les tocó y ahora a cambiarlo. 

Estamos nosotros los setentones, que cobramos 10 y poquitos mil pesos. ¿Qué pasa con nosotros? ¿Alguien puede pensar que se puede vivir con eso a los setenta y pico de años? Pero no tenemos lobby, nos falta evidentemente energía para quejarnos, y por ende después de una vida de trabajo, tranquilo, honrado de ciudadanos comunes, nos encontramos con esta noticia. 

Vemos que hay pensiones para los que la dictadura trató mal, pensiones para los de Guantánamo, pagos de sueldos millonarios a los que salen del parlamento. ¿Y? Los setentones, mate y playera (si se la compró antes).
Hoy sale el gran dilapidador a hablar de justicia. ¿Y nosotros? Claro, nos quejamos un poquito y después a mirar crecer los árboles de abajo.
El futuro de los que tuvimos un pasado de trabajo común, la base de la sociedad, es negro, como la tierra del cementerio.