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Respuesta a Hebert Gatto

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@| Hebert Gatto se ha referido a mi persona en un artículo titulado “Educación: planes y oscurantismo” el día 30 de abril.

Critica mi oposición a apoyar un documento “en proceso de evaluación y de consulta” que se titula Marco Curricular Nacional (MCN) y que el CODICEN aprobó por mayoría. Los votos en contra fueron dos, de la consejera Daysi Iglesias (no Daisy Tourné, como erróneamente dice el autor del artículo) y yo. Considera que la fundamentación al documento es porque “está concebido para dar respuestas económicas en el marco del sistema capitalista, en lugar de promover, como debería, una ‘ética liberadora’”.

Hombre docto, Gatto no debería caricaturizar así una discusión que sabe de gran complejidad, salvo que su interés sea desprestigiar a mi persona y atar mi nombre al de una fuerza política que es, según él, “furgón de cola de propósitos irreales, dogmáticos, anacrónicos y oscurantistas”. Quienes en el CODICEN representan partidos políticos no somos ni la consejera Iglesias ni yo; son los otros tres integrantes del órgano. Nosotros representamos a los y las docentes que nos eligieron por voto secreto. Es cierto que, en parte, sintetizamos “la opinión de los sindicatos de la enseñanza y del propio PIT-CNT”. Por lo tanto intentamos no cometer ningún “error lógico infantil”.

Sí pienso que “la autonomía institucional ni siquiera está plasmada en la ley de 2008”. No pienso, como se me atribuye, que la autonomía de la ANEP deba ser “superior a la de la Universidad de la República”; creo que debería ser igual. El artículo 202 de la Constitución establece que los entes de educación serán “regidos” por “consejos directivos autónomos”.
El 203 abre la posibilidad de que los Consejos Directivos sean “designados o electos”.

¿Está prohibido pensar que sería correcto que la ANEP tuviera un Consejo Directivo electo? Yo creo que no y sostengo que la única forma de garantizar la no injerencia del gobierno de turno sobre los proyectos de enseñanza es que no dependan de los ciclos electorales quinquenales. La vida ha demostrado que ningún gobierno ha logrado resolver los problemas educativos en cinco años. El actual gobierno lleva más de dos años y sus representantes piensan comenzar a aplicar el MCN en 2023, para primero y cuarto de educación media. Seguirán con segundo y quinto en 2024… y se les termina el período. Un lustro no da. Hay que pensar en décadas; sólo se logra con una autonomía real. “Hay que separar la administración escolar de la acción deletérea de las pasiones” dice Varela en La Legislación Escolar. Creo que tenía razón, en el lejano 1877.

“Ceder a presiones menores” es ceder a esa “acción deletérea”.

El doctor Gatto que fue frenteamplista hasta 1989, nuevo espacista hasta 1994, luego colorado y hoy integra la coalición gobernante (creo que como simpatizante del Partido Independiente) bien debe saber de esas pasiones.

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