@|Me voy a referir concretamente a dos hechos recientes que han llamado poderosamente mi atención, relativos a la política y a la salud.

Por un lado, el 14 de setiembre de 2020 Uruguay apoyó una moción del Consejo Económico y Social de la Naciones Unidas de condena a Israel por “violaciones sistemáticas de los derechos humanos del pueblo palestino y sus efectos en la mujeres y las niñas”.
Ese voto la Cancillería uruguaya lo tildó de “error circunstancial” y le costó el cargo al entonces Director General para asuntos políticos del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Este año, Uruguay vuelve a votar en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU a favor de 3 resoluciones, una de las cuales “acusa al Estado Judío de estar cometiendo serias violaciones a los derechos humanos y posibles crímenes de guerra contra la humanidad en los territorios ocupados”.
Respecto de este voto, en la Cancillería señalaron que “la delegación uruguaya actuó conforme a instrucción y que se contemplaron reivindicaciones de ambas partes del conflicto”.

Por otro lado, una delegación procedente de Israel integrada por cuatro destacados profesionales vinculados a la salud del hospital estatal de Israel Sheba-Tel, arribó a Uruguay para compartir su experiencia en el combate a la pandemia del Covid-19, en el marco de una colaboración que incluye una donación de equipamiento.

La delegación está integrada por el Doctor Moriya Suliman, la Licenciada en Enfermería de la unidad de Cuidados Intensivos de Coronavirus Rony Eshkenazy, el Director de la Unidad de Calidad y Seguridad que está encargado del Programa de Inmunización Institucional contra el Covid-19, Amit Gutkind, y el Vicedirector de operaciones del Hospital, Shay Swissa.

Dicha visita incluye una donación de equipos médicos del Estado de Israel a Uruguay, por un valor aproximado de 200.000 dólares.

Estos dos recientes hechos de las conductas de los gobiernos de Uruguay e Israel merecen ser destacados para que el estimado lector saque objetivamente sus conclusiones y en lo que al suscrito respecta, el mismo, ya ha sacado las suyas.