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Mucho nerviosismo

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@| Es muy fácil explicar el nerviosismo del Frente Amplio, principalmente del Poder Ejecutivo.

En las elecciones pasadas a un año de ejercer el voto, llevaba el Frente una intención de voto del 44% hoy lleva un 34%. 

Por allí se puede explicar el nerviosismo de Bonomi y su altercado con unos tabacaleros, por allí se puede explicar la barbaridad de Muñoz tildando de plaga a una religión, o la falta de respeto de Cosse ocultando al Parlamento, si, al Parlamento, los gastos de su obra cumbre Antel Arena (felicito al Dr. Heber por su alocución sobre éste tema). También el nerviosismo de Rossi que ante la preocupación de vecinos de Capurro por el tren de UPM, (atención que no será de pasajeros, transportará productos químicos y celulosa; trenes de 800 m a una velocidad de 80 Km/hora, pasando cerca de casas con mas de 100 años de antigüedad), y de una comisión conformada por arquitectos, ingenieros, y abogados que hicieron escuchar sus argumentos pacíficamente; el Sr. Ministro respondió que ya estaba decidido y sería así. Prueba contundente de la ganas de dialogar del gabinete.

Nerviosismo de Benech, supongo que por sus pocos conocimientos y querer imponer medidas que el campo no necesita. Están reclamando otras cosas, pero el Ministro no escucha. Hasta el mismísimo Presidente, profesional reconocido mundialmente, habla con periodistas con una ironía que me gustaría como ciudadano que nos explicara el motivo. 

Así no se ganan elecciones, con la pesada no se ganan elecciones ni nadie se perpetúa en el poder, por lo menos en Uruguay. 

Tenemos recuerdos frescos, se están cumpliendo 35 años de un río de democracia que increíblemente el Frente Amplio, así como lo leen el Frente Amplio parece que olvidó. 

Esperemos que el nerviosismo pueda ser controlado por el bien de toda la República Oriental del Uruguay.

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