@| Debido a la gran magnitud de migraciones humanas que se produce actualmente en América Latina, hemos llegado a un momento de reflexión similar al que abordó la Unión Europea en relación a las migraciones africanas y de otros países que también se producen actualmente en aquel continente. 

Nuestro país se ha caracterizado a través de la historia por su solidaridad ante los problemas humanitarios de otros países.
Esta orientación se ha continuado hasta nuestros días, abriendo las puertas actualmente a todos aquellos latinoamericanos que por diferentes razones se ven obligados a abandonar su tierra natal.

En mi opinión es urgente una concertación de todos los países de nuestro continente con el fin de definir una política adecuada para recibir las masivas migraciones, que llegan principalmente de países tales como Venezuela, República Dominicana, Cuba, etc. 

Tal como se hizo en Europa necesitamos definir ciertas normas de acuerdo a los parámetros que puede ofrecer cada país receptor. De esta forma se deben estudiar las capacidades de estos países de acuerdo a su economía y a sus potenciales posibilidades de empleo. 

Tales normas ayudaran a saber con exactitud el número y la procedencia de los migrantes que llegarán a nuestro país en los próximos años.
Al mismo tiempo esta política de migraciones permitirá equilibrar la oferta de empleo tanto de los migrantes como de nuestros compatriotas.

Uruguay necesita desarrollar ciertas zonas rurales que podrían ofrecer oportunidades de empleo. 

No olvidemos que en nuestra propia historia se han registrado inmigraciones de diversos países que sin lugar a dudas ayudaron en el desarrollo de lo que es actualmente nuestro país.