Publicidad

Una instantánea de nuestra realidad

Compartir esta noticia

@|Los precedentes gobiernos frenteamplistas realizaron mejoras, ¿por qué negarlo? Ese era su cometido.

Los votaron para que desempeñaran y ejecutaran cabalmente el rol que les confiaron.

Podría detallar la enorme cantidad de gestiones e inversiones fallidas y deficitarias cuyos financiamientos recayeron directa e indirectamente en el pueblo. Otro tanto podría hacer con sus programas sociales basados en el asistencialismo, que generó una deleznable dependencia.

Nuestras leyes sancionan a quienes cometen delitos. Los políticos están blindados cuando se trata de injurias verbales.

¿Por qué son impunes cuando aprueban acciones en perjuicio del pueblo y el país? Esto sería interesante para legislar en el futuro.

Pero me dedicaré al presente.

Cada vez que integrantes de la actual oposición plantean mejorar las propuestas del gobierno “oficialista”, serían bien venidas si no fuera porque es fácilmente constatable que tienen una finalidad proselitista, para quedar bien con las bases, cuya pobreza mantuvieron por razones “estratégicas”.

Podríamos estar en mejores condiciones económicas para atender las actuales demandas generadas por la epidemia, si hubiéramos recibido los adecuados recursos de quienes ponderaron nuestra economía y pregonaron haber abatido la pobreza. La epidemia desenmascaró la real situación económica y social de una vasta parte de la población.

Tenemos, más que nunca, personas viviendo por debajo de la línea de pobreza, en situación de calle y en asentamientos.

Irrita escucharlos demandando al actual gobierno invertir ingentes sumas de dinero tras dejar una hacienda paupérrima, con una ingente deuda externa y con carencias de todo tipo y calibre.

No se trata de regurgitar el pasado, sino de denunciar el “presente” que recibimos.

Politólogos y sociólogos preconizan una concordia entre los partidos políticos como consecuencia de la pandemia. Me recuerda a los relatos sobre cómo las tribus se unían para luchar contra los “conquistadores”.

Reeditaríamos a nuestros indios para luchar contra un enemigo común.
El pueblo votó un cambio. Interpreten lo que eso significa.

Las encuestas de aprobación superan a los votantes de la Coalición Multicolor. Saquen conclusiones. ¿Cuándo los desvalidos fueron tratados como ahora? ¿Cuándo tuvimos la sensación de tener un gobierno ocupado y preocupado? Dejen de pensar en ideologías perimidas y adopten una única preocupación: el País y la Nación a la cual pertenecen. Sumen, no dividan. Pónganse la celeste.

Es hora de que los auténticos y honestos izquierdistas separen la paja del trigo. Hay muchos advenedizos que los usaron como medio para otro fin.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad