@|No es exagerado el miedo que provoca que te apunten con un arma, que te hagan tirar al piso, que maten o lastimen o amenacen. Te atemoriza, te paraliza, tienes pesadillas y ataques de pánico.

Es que la inseguridad en nuestro país está tomando dimensiones atemorizantes. Y lo que más miedo da, es la impunidad, cada vez mayor, con la que actúan.

En la Ruta 1 apedrean autos, ómnibus, atacan señoras para robarles. Los almacenes de barrio trabajan con miedo; los repartidores que entran a nuestra Ciudad del Plata lo hacen también con mucho miedo, sin saber qué pasará con ellos; con la desesperada necesidad de trabajar, aún arriesgando la vida.

¡No puede ser que, hoy en día, un trabajo honesto sea con riesgo de vida por la delincuencia! No puede ser, pero es, desgraciadamente. Nuestro país está dominado por el terrorismo. La delincuencia está moldeando nuestra vida a su antojo.

¿Se puede vivir sin miedo? ¿Se puede vivir en paz?

Respuestas que nunca llegan…pasan gobiernos y todo sigue igual, o tal vez, empeora.