@|Médicos reunidos en asamblea, deciden no parar actividades pero adherir al paro, cuya plataforma por aburrida, repetida y perimida, ya cansa y en las circunstancias actuales, no solo cansa sino que indigna.

No son todos, felizmente. El colectivo Juntos salió a desmarcarse del tema, aduciendo que aún con vacunatorios abiertos, quién podría pensar que vacunadores y público pudiera fácilmente trasladarse para hacer efectiva su vacuna. O sea, te doy, pero no tanto. Soy bueno, la actividad no se detiene; eso sí, a los efectos las consecuencias son las mismas. Porque esto perjudica, una vez más, a quienes dicen defender, o sea, a los más vulnerables. El que puede, tomará su auto e irá, el que no ni se moverá de su casa causando un daño terrible, en toda la retracción de la agenda y colaborando al desmadre aún mayor de esta terrible pandemia.

La oposición le está errando feo y no parece notarlo y lo más lamentable es que esto se volverá como un bumerán contra ellos mismos. De ello hablan las encuestas de apoyo al Presidente. Y está errando en muchos frentes, no solamente en el sanitario.

Cuando le preguntan a la Ing. Cosse sobre los números del Antel Arena, responde que de eso no habla, sí de los 4000 y pico de uruguayos fallecidos en pandemia.

El pasado lunes 7, en el programa Todas las Voces, hubo un contrapunto respetuoso entre el Sr. Murro y el Sr. Saldain (a quien el público escucha ávidamente por su solvencia en el tema de la reforma de la Seguridad Social). Contrapunto que quedó trunco cuando el Sr. Murro, a falta de mayores argumentos sobre el tema, salió también con el tópico de los fallecidos por pandemia (tópico de quien nadie puede desconocer la tragedia que ello significa, pero que no venía absolutamente al caso en el tema tratado). Todo ello provocó un cansancio evidente en el ánimo del Sr. Saldain, que lo dejó allí como un caballero que es y nos privó a los televidentes de interiorizarnos de algo que nos concierne y preocupa a todos los uruguayos.

La oposición está con la brújula muy perdida, ni que hablar si agregamos las inútiles próximas interpelaciones a dos de los ministros cuya aprobación es casi abrumadora y que están perdidas antes de comenzar. ¡Linda manera de hacer perder el tiempo a gobernantes que tienen entre manos la salud de la gente, la diferencia entre vivir y morir!

La historia los juzgará y aún antes, los juzgará la gente, que no es tonta y que, como dicen los jóvenes, ya no se tragan la pastilla. A seguir luchando para salir fortalecidos de este drama todos los que deseamos lo mejor para nuestro país y ojalá podamos pronto dejar de llorar a nuestros muertos.