@|Los uruguayos debemos estar adormecidos, ya nada nos llama la atención.
Asesinaron y desmembraron a un individuo preso en una cárcel de este país a manos de su compañero de celda. La víctima, el célebre Pelado, fue asesino serial desde los 13 años.
El victimario con antecedentes por asesino y decapitador.
Las autoridades del instituto carcelario decidieron alojar a los dos asesinos con los peores antecedentes en una misma celda, armados como se puede constatar como para instalar una carnicería de barrio o un block quirúrgico.
Y no es la primera vez que sucede algo así.
¡Qué terrible infierno debe ser la cárcel! Imaginemos por un momento que algún ser querido tenga la mala fortuna de caer preso y vaya a parar a uno de estos institutos del Estado.
Es casi una condena a muerte en cuotas y con sufrimiento prolongado.
De correccional tiene poco y nada.
¿Nadie se va a hacer responsable?
¿La única cabeza que va a caer es la del Pelado?
En cualquier país civilizado, y de primera, como les gusta proclamarse en campaña política, esto no pasa ni queda así.
¡Despierten uruguayos, despierten!