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Daniel, el travieso

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@|No sé si será por mi avanzada edad, que veo rostros y veo más que eso.
Especialmente veo traviesas intenciones en esa risa que fabrica Daniel Martínez cada vez que se enfrenta a una cámara que es como un decir: “te voy a engañar”. 

Como lo hizo prometiendo veredas y Villas y Castillas pidiendo el voto para llegar a Intendente.  

Veredas que no tiene Camino Maldonado desde Susana Pintos hasta Punta de Rieles que es buena parte Municipal. Pero tampoco tiene veredas transitables el Laboratorio más grande de Uruguay ubicado en el km 12.500 de este camino y no por falta de medios económicos sino por desinterés municipal en hacerlas. 

Camino Maldonado no es una vía cualquiera, es el área de influencia de 200.000 montevideanos, pese a tener solo tres kilómetros de extensión.
Pero son los tres kilómetros más descuidados de todas las capitales de Uruguay. 

No existe en otro lugar esa falta de veredas, falta de higiene; ni hablar de que no hay bicisendas ni proyecto para construirla. 

Y como ícono del abandono, permanece en el centro de la calzada, en el cruce con Susana Pintos y Carlomagno, un monolito que en su momento homenajeó al ciclista Wilde Baridón, que muriera en ese lugar por efecto de una sobredosis. Hoy, olvidado por los ciclistas, pero interrumpiendo la visión de quien pasa por su lado ya que tapa los vehículos que circulan hacia en Centro, lo que ha causado siniestros mortales. 

Sr. Daniel Martínez: ¿es mucho pedirle un poco de seriedad para arreglar esta importante vía de tránsito?

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