@|Cuando a uno le hablan de la IMM, la primera palabra que aparece es basura, o veredas rotas, tal vez transporte caro y súper deficiente. Pero nunca que esa institución es caritativa.

Sin embargo, la IMM nos da una gran sorpresa y se dispone a darle, por sorteo y en cuotas calificadas, mil puestos de trabajo, que no existen porque no están en el presupuesto, a personas que no tienen ningún ingreso. Si no faltaran menos de 60 días para las elecciones y esta situación fuera de ayer, todo andaría sin sospechas.

Pero, siempre hay un pero, la situación tiene más de cuatro meses y las elecciones son en 60 días; y la selección de personas y comienzo del trabajo será por lo menos dentro de siete o diez días más.

Solidaridad, esa palabra siempre oportuna, en este caso puede traducirse por aprovechar las necesidades de algunas personas casi al grado de la extorsión. Claro, nadie les va a decir qué deben votar. Nadie les dirá que lo que le ofrecen es tan falso como tramposo. Algún candidato hasta llegó a justificar este proceder aludiendo a que otros hacían lo mismo. ¿Cómo? ¿No eran tan distintos, Ingeniero? ¿Dejaron de serlo? ¿Cuándo? ¿No tienen más de 70 millones de dólares de déficit y más de 213 comprometidos en cosas que no pagaron?

O sea, hay 300 millones de dólares de agujero. Medio presupuesto anual. De eso no hablan. ¡Deberían decir que lo que les vayan a pagar no lo ponen ustedes, lo pone el pueblo!