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Si es así... soy de derecha

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@|Estuve meditando estos días y debo confesarles que estoy harto de que el gobierno y sus candidatos hablen de ellos y de nosotros "los de la derecha", o sea los que no pensamos como ellos.

Jamás se me hubiese ocurrido que todo se simplificaría a tal extremo que hay que ser de izquierda o de derecha.

Creía más bien que el futuro político se desarrollaría entre los que quieren un Uruguay integrado; es decir un Uruguay moderno que atienda los problemas a las generaciones futuras o a un mundo atado a concepciones envejecidas que lo único que traen es más hambre y marginalidad.

Defensor como soy de la unidad nacional, viviendo justamente esta descomunal batalla ideológica plantada por el gobierno y sus candidatos que significa este interregno entre un viejo y un renovado estilo, que es justamente esta bisagra entre una clase política que agoniza y otra que está naciendo; y que lastimosamente hay políticos, gremialistas, religiosos, industriales, comerciantes, militares, periodistas, etc. que se obstinan en desconocerla, siendo uno de los pecados capitales que debemos soportar y que nos servirá de salvavidas de plomo que hemos adquirido si seguimos desconociendo esta realidad.

Estamos viviendo momentos muy desgraciados donde todo está sujeto a un revisionismo peligroso y preocupante.

Lo que me preocupa es la calificación que hoy se hace de “izquierdistas” o “derechistas”.

Y sobre esto creo que estamos viviendo y viendo en nuestro castigado país, un panorama exacto de hechos que se están desarrollando justamente por los que se titulan de izquierda que me permite, al desaprobar su accionar no estar de ese lado, por lo que debo necesariamente pensar que debo pertenecer al otro.

Es decir, si soy todo lo contrario a lo que se definen los izquierdistas; pero hoy este predominio casi tiránico y perverso que esta izquierdización está sometiendo al país, hace que salga a contrarrestar su accionar. No por lo que representa su pensamiento, sino por la terrible y dantesca presencia en todos los actos de gobierno.

Si se habla y se concreta el resurgimiento y valoración del accionar guerrillero, y si eso es una actitud izquierdista generalizada que yo no comparto, ¿eso es ser de derecha? Pues entonces seré de derecha.

Si rechazar el aborto y estar contra la droga es ser de derecha, nuevamente me pregunto, ¿soy de derecha?

Si por reclamar por nuestro primer derecho humano que es el derecho a la vida que todos los uruguayos perdimos, ¿soy de derecha?

Si por denunciar la corrupción que aplasta al pueblo y no se le rinde cuenta de quienes son los culpables, ¿soy de derecha?

Si querer rendir homenaje a personajes que respeto y rescato que fueron asesinados cruelmente por las hordas guerrilleras que fueron criadas, alentadas y entrenadas en países donde se practicaban las enseñanzas del terrorismo internacional es ser de derecha, reitero, ¿seré de derecha?

Si cree que vi con buenos ojos como una mayoría accidental le doblaba el brazo al pueblo y dejaba sin efecto la "Ley de Caducidad" y que cuando se votó me resultó repugnante ver como por el sumiso concepto de "obediencia debida" legisladores del gobierno levantaban sus brazos para votar lo que el Soberano había decidido; ¿eso es ser de derecha?

No quiero seguir abundando en mayores detalles, pero al correr de mi escrito me doy cuenta que ¡nunca me imaginé que a la altura de mi vida llegara a saber que efectivamente ¡soy de derecha!

Yo ya hice mi palinodia, espero que la hagan los guerrilleros, que creo son de izquierda, ¿o no?

Por último, quiero decirles una cosa que creo que no la tienen en cuenta: ¿saben la cantidad de uruguayos que pensamos así y que muchos no se animan a expresarlo?

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