A raíz de 18 investigaciones científicas financiadas por el Banco Mundial, se comprobó la relación causal entre el hábito de fumar y la muerte. Desde entonces la Organización Mundial de la salud ha desarrollado una eficaz obra de divulgación sobre el hecho, que culminó con un tratado para el control del tabaquismo.
El 21 de mayo de 2003 fue un día histórico para la salud pública mundial. En la 56a Asamblea Mundial de la Salud, los 192 Estados Miembros de la OMS adoptaron por unanimidad el primer tratado mundial de salud pública, el “Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco”.
En América Latina mueren más de mil personas por día debido al hábito de fumar. Sin embargo, Argentina, Cuba y República Dominicana son países que aún no han adherido al primer tratado contra la epidemia voluntaria.
El Uruguay figura entre los líderes de la acción conjunta por el control de la epidemia tabacal, que va perfeccionándose a lo largo de un tiempo largo.
En los últimos 50 años l

A raíz de 18 investigaciones científicas financiadas por el Banco Mundial, se comprobó la relación causal entre el hábito de fumar y la muerte. Desde entonces la Organización Mundial de la salud ha desarrollado una eficaz obra de divulgación sobre el hecho, que culminó con un tratado para el control del tabaquismo.
El 21 de mayo de 2003 fue un día histórico para la salud pública mundial. En la 56a Asamblea Mundial de la Salud, los 192 Estados Miembros de la OMS adoptaron por unanimidad el primer tratado mundial de salud pública, el “Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco”.
En América Latina mueren más de mil personas por día debido al hábito de fumar. Sin embargo, Argentina, Cuba y República Dominicana son países que aún no han adherido al primer tratado contra la epidemia voluntaria.
El Uruguay figura entre los líderes de la acción conjunta por el control de la epidemia tabacal, que va perfeccionándose a lo largo de un tiempo largo.
En los últimos 50 años la venta de cigarrillos bajó a la mitad en EEUU. Supongamos, con optimismo, que en veinte años más, se extinga el hábito en el mundo, debido a la acción de los acuerdos internacionales. Como actualmente, el tabaco causa alrededor de 13.500 defunciones por día, al ritmo que vamos, morirán unos cien millones de personas, antes de que cierren las tabacaleras. Es un costo dramático, el que impone la mano suave con las fábricas de cigarrillos, que ganan miles de millones practicando el homicidio legal,… mientras las dejen cometerlo.
A nivel mundial, la mitad de los niños están expuestos al humo del tabaco en su propia casa. El 47,5% de los hombres fuman. El 10,3% de las mujeres fuman. El cigarrillo es el único producto de consumo legalmente disponible que mata a quien lo consume normalmente.
Al modo de don Juan Tenorio, las tabacaleras piensan: muy largo me lo fiais; y se llenan de oro.
Pero estas son meras consideraciones generales. Para ponerme al día, voy en consulta a conversar con el doctor Eduardo Bianco, a quien se debe en buena medida la admirable alarma de los orientales, cuando se divulgó la maldad del tabaco. Pregunto: ¿Qué importancia y qué alcance tiene reiterar la prohibición de publicitar la venta de tabaco?
Bianco: No hay reiteración hay aplicación total. El Convenio Marco para el Control del Tabaco (el primer tratado mundial de salud pública), en su Artículo 13 estableció la prohibición completa de la publicidad, promoción y patrocinio del tabaco. Los países ratificantes se comprometieron a cumplir con este requisito, antes de los 5 años de entrada en vigencia dicho tratado a nivel de país. Por lo tanto, a Uruguay le correspondía hacerlo antes del 27 de Febrero del 2010.
Con la Ley 18.256 de marzo del 2008, nosotros hicimos un avance significativo en el control de la publicidad, pero no se prohibió en el punto de venta y es recién ahora que se completó. El “flanco” libre que se le dejó al comercio, fue usado y abusado, por la industria tabacalera, colocando publicidad ilegal en el exterior (pintó los quioscos y otros puntos de venta con los colores representativos de marcas comerciales), minimizando la contra publicidad en el interior de los mismos, y desarrollando una estrategia de para tener de “rehenes y aliados” a los kioskeros y a la organización que los agrupa, para usarlos en el momento que se planteara llegar a cumplir con este requisito.
Fue recién en mayo del 2012 cuando el Ministerio de Salud Pública, por primera presenta la idea al Parlamento, fue la Ministra Muñiz, quien en mayo del 2013, logra entrar un proyecto de ley para prohibir en forma completa la publicidad, incluyendo el punto de venta y la exhibición de los productos del tabaco.
Lo que Uruguay acaba de alcanzar (legislar la prohibición absoluta de la publicidad), ya ha sido legislado y aplicado por más de 20 países, según la OMS. En nuestra región, cinco países han aprobado legislaciones completas, según la OPS: Panamá (2008), Colombia (2009), Brasil (2011), Chile (2013) y Suriname (2013).
Pregunto: ¿Qué relación tiene este paso severo por afinar el control, con respecto a nuestro juicio con Philip Morris? ¿Agrava o aminora nuestra situación?
La demanda de Philip Morris, “enlenteció” el proceso de control del tabaco en nuestro país. Lo cual era uno de sus principales objetivos: inmovilizar a uno de los líderes internacionales más adelantados.
Pero una vez superada esa fase de “duda”, nuestro país siguió adelante con el proceso de implementación del Convenio Marco, y la intención de priorizar la salud y la vida de la población, ante intereses comerciales.
Con respecto a si aprobar esta nueva ley, puede ser beneficioso o no para nuestro país: No cabe ninguna duda. Para estar sólido en nuestra defensa, Uruguay debe demostrarle a Philip Morris, a los árbitros y al mundo entero, que es coherente en su decisión de proteger a su población, en respetar el compromiso internacional adquirido al ratificar el Convenio Marco, y con su propia Constitución que le señala la necesidad de proteger la vida y la salud.
Pregunto: A cuanto puede subir la indemnización a pagar, en caso de perder. Se han barajado cifras muy diversas, ¿Usted qué piensa del subibaja de las predicciones?
Bianco: En marzo del 2010, aparecieron en algunos medios, cifras escandalosamente altas, 300 millones, 2.000 millones, que Uruguay debería pagar si se perdía el juicio. Creo que esto fue parte de la estrategia de PMI para asustar al Gobierno.
Nosotros consultamos a expertos internacionales en arbitrajes, y nos dijeron que como disparatado, Uruguay debería pagar 75 millones de dólares. Desde que se comenzó a aplicar la política impositiva del control del tabaco, se incrementó la recaudación en más de 100 millones de dólares anuales. Los últimos datos, salidos a luz, creo que por la propia PM hablan de que estarían reclamando unos 25 millones de dólares. O sea: sigue siendo plata, y no queremos que Uruguay les pague un peso de indemnización, pero en el peor de los casos, no sería una tragedia económica para el país.
Pregunto: El Uruguay tardó en reaccionar y luego retomó el ritmo de sus ataques y desafió el poder de las tabacaleras. ¿Es prudente? Hay una carrada de plata en manos de los fabricantes de veneno. ¿Tenemos respaldo para derrotar tanta potencia de corrupción?
Bianco: Paralizar la implementación de políticas de control del tabaco hubiera sido una “debilidad.”
Esto es una política de Estado, y no la política de un Presidente. Batlle ratificó el Convenio Marco y comenzó las primeras medidas. Vázquez le dio el gran impulso (recordar que el Convenio entró en vigencia internacional 2 días antes de asumir su presidencia); y Mujica ha continuado avanzando: no retrocedió en la aplicación de las medidas a pesar de la presión de Philip Morris, y se acaban de aprobar la Prohibición Completa de la Publicidad (Julio 2014) y el Protocolo sobre Comercio Ilícito del Tabaco (Agosto 2014). No es poca cosa
Insisto: ¿Qué ha hecho nuestro gobierno para organizar ¡ya! a sus defensores y blindar así, la honestidad a ese tribunal mediante una actitud solidaria de quienes defienden la salud y no la muerte? ¿Hubo y hay trabajo nuestro en tal sentido?
Bianco: Doctor Maggi, si usted o yo supiéramos algo de eso, no lo diríamos.
YO: Buena respuesta. Es la mejor noticia de esta conversación.