Desde hace más de 30 años está ligado a la reconocida fábrica de cerámicas, reconvertida en cooperativa desde 2013 luego de su cierre en 2009 a causa de un quiebre. "Hay que romperse la cabeza para que esto sea rentable", asegura.
La Cooperativa de Trabajadores de Empalme Olmos denunció en el Parlamento que estudios realizados a la vajilla vendida en distintos bazares de Montevideo —desde los más top hasta los más populares— indican niveles de plomo y cadmio tan altos que se puede hablar de "productos envenenadores".