El dólar subió ayer por tercera jornada consecutiva, esta vez 0,3%, a contramano del mundo, tras las repercusiones de la primera conferencia de Donald Trump como presidente electo.
Brasil optó ayer por otra profunda alza de tasas de interés para convencer a los inversores de la seriedad de la lucha del gobierno para controlar la inflación, pese a los temores de una recesión.