Dijo que es una “tontería” sacar los símbolos confederados.
Crece la polémica en EE.UU. por retiro de estatuas de jefes confederados.
Venerado en el sur, le ofrecieron ser el jefe militar del norte.
La Casa Blanca se vio obligada a repudiar expresamente al KKK y los nazis.
A pesar de que la extrema derecha radical estadounidense vive una renovación bajo el presidente Donald Trump, el Ku Klux Klan, que el sábado organizó un mitin en Virginia, no es más que la sombra de la poderosa organización que alguna vez fue.
Un tercer hombre resultó herido. El sospechoso de las muertes es un conocido supremacista blanco de Portland.
