El exjefe de campaña de Donald Trump, Paul Manafort (69), fue sentenciado ayer miércoles a 43 meses más de prisión por cargos de conspiración en un caso derivado de la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre el papel de Rusia en la elección estadounidense de 2016.
Fue condenado por los ocho delitos de fraude de los que fue declarado culpable en agosto pasado.
Manafort aceptó colaborar en la investigación del caso Rusiagate.
Paul Manafort acordó declararse culpable de conspiración contra EE.UU. y de obstrucción a la justicia.
Caso derivado de la trama rusa que golpea al presidente.
Tranquilo y participando de cerca en las discusiones de sus abogados, el exjefe de campaña de Donald Trump, Paul Manafort, asistió ayer martes a la apertura de su juicio, el primero acusado por la explosiva investigación sobre la trama rusa que envenena el mandato de Trump.
Le revocaron el arresto domiciliario; está acusado de manipular testigos.
Es acusado de tentativa de soborno a testigos en la investigación rusa.
“¿Por qué no se centran en la corrupta Hillary?”, se preguntó el presidente.
Los agentes federales incautaron “documentos y otros materiales” bajo orden del fiscal que investiga la intervención de Rusia en las elecciones de 2016.