El grupo tiene como fin promover una salida pacífica a la crisis venezolana mediante nuevas elecciones presidenciales y la distribución de ayuda humanitaria.
El 30 de enero, México y Uruguay anunciaron que habían resuelto organizar una conferencia internacional con el fin de sentar las bases para establecer un nuevo mecanismo de diálogo con la inclusión de todas las fuerzas venezolanas.
Uruguay apoyó la propuesta de “elecciones libres y transparentes en Venezuela”, pero vetó la exigencia de la libertad para los presos políticos del régimen de Maduro.
Encargado de negocios recibió el pedido de los opositores.
Apoyó una declaración que pide garantías para que haya pronto un proceso electoral.
Brasil y la OEA no creen en el “Mecanismo de Montevideo”.
El canciller uruguayo y la representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores realizaron una conferencia de prensa.
Lo integrarán países europeos y también latinoamericanos.