Se terminaron las frases hechas, y supongo que también se terminarán las críticas de aquellos que decían que la selección de Tabárez era un club de amigos.
"Papelito” Fernández es parte del proceso, es hombre de selección y está en plena vigencia. Conoce el sistema, el funcionamiento, y a sus compañeros de plantel. Tiene el camino allanado, y puede sumar experiencia en una doble fecha complicada para la Celeste.
La selección Sub 20 terminó su participación en el Mundial de Corea 2017. Fue cuarta, no alcanzó el podio, pero no perdió en los 90 minutos.
No hay que dramatizar, eso está claro, pero hay que preocuparse. El rendimiento futbolístico de la selección uruguaya bajó una enormidad y parece no levantar.
Muchos creyeron que esta Sub 20 de Uruguay era “de otro planeta”, que había surgido poco menos de la escuela del Barcelona, que no tenía el estilo ni seguía la identidad del fútbol uruguayo, sin embargo, a lo largo de este Mundial de Corea, la Celeste, fue ‘mutando’ de acuerdo al rival de turno.
Todos los clubes se quejan que los partidos no tienen superávit, que dan pérdidas, que va poco público a las canchas, sin embargo, Segunda División compite con Primera y ahora también la Segunda B Amateur.
Partido redondo de Peñarol ante Fénix en el Campeón del Siglo. Triunfo claro, con luz y con momentos de muy buen fútbol.
La Sub 20 de Uruguay clasificó a la siguiente ronda de la Copa del Mundo, y lo hizo con buen funcionamiento colectivo y altos rendimientos individuales.
Lo dijo Tabárez: "Cáceres es el Suárez de la defensa", una definición que pinta de cuerpo entero la importancia que tenía la presencia del hoy jugador del Southampton en la selección uruguaya. Tiempos en los que no se lesionaba y jugaba seguido en la Juventus.
El sábado se define el título del Apertura. Se pasará raya al primer torneo del año y solo Defensor y Nacional están en la pelea por el cetro.