Con valores que superaron ampliamente los precios del novillo gordo, Central Lanera Uruguaya (CLU) cerró su operativo de corderos pesados 2014 y lanzó la operativa para el año en curso.

La iniciativa lleva más de 20 años en Uruguay y ofrece algunas ventajas para el productor de corderos, como lo son adelantos de hasta US$ 45 por cordero inscripto; precio base o mínimo entre US$ 3,50 y US$ 3,70 por kilo según el período de faena; la presencia permanente en el frigorífico de un fiscal y garantía de colocación de la producción, entre muchas otras coberturas.

A la vez, la CLU ofrece un sobreprecio de US$ 0,10 por kilo y otro por cumplimiento de US$ 0,05.

También se ofrecen hasta US$ 5 adicionales de adelante para la compra de ración en la cooperativa a la que pertenezca el productor remitente.

La institución espera que los productores inscriban más corderos en este nuevo llamado que se puso en marcha, por el precio promedio pagado en los últimos operativos.

El mercado mundial de carne ovina continúa mostrando señales de mucha firmeza, con producciones menores en Australia y Nueva Zelanda, países que dominan el negocio del ovino en el mundo e inciden fuertemente en el mercado mundial por sus volúmenes exportados. A la vez, en Uruguay difícilmente pueda crecer la producción de corderos, porque el stock ovino continúa achicándose.

La producción mundial de carne ovina será inferior a la oferta y eso asegura valores altos, lo que se suma, en el caso de Uruguay, a la oportunidad de exportar sus cortes con huesos, en breve, a países como Estados Unidos, Canadá y México. Mientras tanto, se continúan las negociaciones sanitarias con la Unión Europea que es el gran mercado para los cortes con hueso y donde el negocio del ovino está más afianzado, manejándose mayores valores. En esos nichos juegan fuertemente Australia y Nueva Zelanda, los grandes competidores de Uruguay, pero aún hay chances de valorizar la carne.

Oferta mundial será inferior a la demanda y eso asegura precios