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Sindicato e Isusa dicen que criterios de OSE en compras perjudican a la industria local

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Un importador de sulfato de aluminio presentó un precio 15% inferior a Isusa, que parará una planta si no hace el negocio. Foto: Archivo El País

PROBLEMAS EN CADENA

Dirigentes sindicales y representantes de la empresa química hicieron foco en que no se prioriza a la industria nacional en los llamados a precios de empresas estatales.

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La empresa química Isusa atraviesa problemas económicos y anunció una reestructura,que inicialmente incluía 110 despidos y 60 envíos al seguro de paro, pero esto quedó en suspenso para negociar con el sindicato. Para mostrar la realidad del sector y buscar soluciones, el Sindicato de Trabajadores de la Industria Química (STIQ) junto a los directores de la compañía han mantenido contactos con el gobierno y el Parlamento.

Al acudir hace unos días a la Comisión de Hacienda de Diputados, dirigentes sindicales y representantes de Isusa hicieron foco en que no se prioriza a la industria nacional en los llamados a precios de empresas estatales, y apuntaron a OSE. u201cSe perjudicó a Isusa en una licitaciónu201d de sulfato de aluminio en polvo que hizo OSE, y existieron casos similares que afectaron a otras empresas, señaló Diver Zoccolini del STIQ.

El presidente de Isusa, Gerardo Martínez, explicó a los legisladores que la empresa fabrica productos químicos y uno de los compradores principales es OSE, al que venden entre otras cosas sulfato de aluminio para las plantas de potabilización. Siendo ya proveedores de la empresa estatal, han visto en el último tiempo u201cuna forma de actuar en las licitaciones que a nuestro juicio es un poco desprolijau201d, indicó.

u201cSe abrió una licitación de sulfato de aluminio que Isusa, que compite contra importadores -que lo único que tienen es un galpón, o ni siquiera eso, sino solo una oficina desde la cual subcontratan-, había ganado por precio, pero sorprendentemente el directorio de OSE o la comisión de compras decidió anularla por temas técnicos. Estos estuvieron atados a una nota que presentó uno de los importadores, pidiendo que se rebajara uno de los requisitos técnicos, que es la acidez del productou201d, contó el ejecutivo de Isusa.

OSE es uno de los principales clientes de Isusa. Foto: Archivo El País
OSE es uno de los principales clientes de Isusa. Foto: Archivo El País

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Los requisitos de calidad del producto químico son regulados por u201cnormas de UNITu201d (instituto privado que fija un estándar) y u201ctradicionalmenteu201d se cumplían en las licitaciones, pero tras la queja del importador u201cse anulóu201d la convocatoria original y u201cse volvió a hacer un llamado, eliminando el requisito de esa norma UNIT, para uno de los parámetros que es la acidezu201d, relató Martínez.

Así hubo un importador que trae el sulfato de aluminio de Turquía que presentó una oferta 15% por debajo del precio de Isusa en la nueva licitación. u201cTodavía no está decidido si OSE resolverá brindar la adjudicación a ese importador, pero nosotros tendríamos que parar una de las plantas por un añou201d si no se concreta la compra de la empresa estatal, explicó el presidente de Isusa.

El dirigente sindical Zoccolini dijo que u201ccon la rebaja de los certificados para presentarse a las licitacionesu201d del Estado, se pone a la industria química u201cen una desigualdad de condiciones, porque se hace imposible competiru201d. Además, sostuvo que la importadora que se presentó con un menor precio u201cni siquiera tiene el producto en el país, mientras que a la empresa productora nacional se le exige un stock en el momento en que se presentau201d. Remarcó que son situaciones que u201ccastigan a la industria nacionalu201d.

En igual sentido se manifestó Martínez: u201cEstamos sustituyendo valor agregado nacional por valor agregado extranjero. No sé si en los números globales se calcula cuál es el ahorro que finalmente pueda tener OSEu201d por comprar a menor precio, pero resaltó que Isusa en 2018 u201cpagó costos de mano de obra por más de US$ 20 millonesu201d y u201cUS$ 7,2 millones fueron al Banco de Previsión Social (BPS) vía aportes personales y patronalesu201d, aparte de lo pago por IRPF. Tomando todos esos números, subrayó que tal vez la decisión de OSE u201cno sea lo más conveniente para el paísu201d.

Zoccolini del STIQ recordó que u201chace un año pasó lo mismou201d con la empresa Efice (productora de cloro), cuando OSE optó por comprar cloro importado desde Estados Unidos. u201cTambién se ha perjudicado a Química Gama, que es otra productora de sulfato de aluminio, que se encuentra en la misma situación cuando se presenta a las licitaciones de OSEu201d, agregó.

Los legisladores de la Comisión de Diputados tomaron nota del reclamo de trabajadores y empresarios. El diputado del Partido Independiente, Iván Posada, dijo que al bajar los estándares de calidad en los llamados se u201cafecta a la industria nacional, y lo que es más grave: se está mirando una parte de la cuentau201d, que son u201clos estados contables de una empresau201d sin atender los impactos en el empleo.

La Comisión votó enviar la versión taquigráfica con los dichos del STIQ e Isusa a OSE, y Posada pidió incluir un apartado preguntando u201ccuáles son los fundamentos que llevan a bajar los estándares de calidad que terminan beneficiando a importadores de productos que compiten con la industria nacionalu201d.

El riesgo ambiental por escasos controles
Isusa fue fundada en 1947 y desde 1951 está en San José. Foto: Archivo El País

Aparte de tener actividad en el mercado de productos químicos, Isusa produce y comercializa fertilizantes. Gerardo Martínez, presidente de la firma industrial, dijo que compiten con productos importados por ejemplo de Egipto, España u otros países, donde hay u201ccondiciones laborales y de producción claramente diferentesu201d a Uruguay. Consideró esto una u201ccompetencia asimétricau201d, porque las empresas extranjeros tienen menores exigencias salariales, de calidad, y aparte los importadores no necesariamente se registran dentro del sector. u201cTodas las empresas deberían estar incluidas en la industria química, regidas bajo el mismo paraguas. De lo contrario, sería como si mañana quisiera establecer una empresa para construir un edificio e inscribirla en el sector comercio; no me lo van a permitiru201d, explicó.

Al referirse a la competencia con los importadores en el mercado de fertilizantes, el Sindicato de Trabajadores de la Industria Química (STIQ) apuntó a los escasos controles y los posibles impactos ambientales. El dirigente Juan Aristegui dijo que mientras Isusa tiene exigentes controles, ingresan materiales que u201cperjudican al productor final y a toda la poblaciónu201d, porque no se inspecciona la u201cforma de distribución del fertilizante en el campou201d y los desechos u201cterminan en el cauce de los ríos haciendo un daño ecológicou201d. A su vez, el sindicalista Diver Zoccolini sostuvo que el control sobre las importaciones u201cdista mucho de los que se realizan a las empresas establecidas de la industria nacionalu201d y hasta se preguntó u201csi el problema de las cianobacterias no será consecuenciau201d del ingreso de este tipo de mercadería u201csin controles en cuanto a su fórmula y aplicaciónu201d.

Acerca de estos temas medioambientales, el diputado Iván Posada (Partido Independiente) solicitó pedir respuestas al Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, así como al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca.

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