Igualmente, los operadores portuarios quieren que se levante la medida.

A dos años de una medida que prohibió el transbordo de mercadería argentina en Uruguay, el Puerto de Montevideo logró sortear su efecto negativo con un incremento de los tránsitos en la terminal. Sin embargo, los operadores portuarios no se resignan a perder definitivamente la llegada de carga argentina.

En noviembre de 2013 la Subsecretaría de Puerto y Vías Navegables de Argentina tomó una medida que perjudicó el funcionamiento de las terminales locales. Mediante la resolución 1108 prohibió los transbordos de mercadería de su país en Uruguay, operativa que tenía un gran dinamismo en el Puerto. Con esa prohibición, exportadores del sur argentino que optaban por trasladar su mercadería hasta Montevideo y desde allí embarcarla en buques de ultramar hacia su destino final debieron tomar otras opciones de carga.

El efecto negativo se hizo sentir fuerte durante 2014, cuando los tránsitos argentinos se direccionaron hacia el puerto brasileño de Río Grande del Sur. Durante varios meses de ese año la operativa general del Puerto de Montevideo cayó, ya que tenía en los transbordos uno de los sustentos de un anterior aumento de actividad. Pero a dos años de la prohibición, en 2015, la situación cambió.

Según datos aportados a El País por el Centro de Navegación, entre enero y noviembre de 2013 (previo a la prohibición), la terminal montevideana recibió 169.359 boxes (cajas, unidad de medida que maneja para sus estadísticas esa institución) en tránsito. En el mismo período de 2014, ya con la prohibición instaurada, los boxes bajaron a 149.772 y este año, en los primeros once meses, aumentaron a 182.673. Las cifras muestran que en los primeros once meses de 2014 los tránsitos cayeron 11,5% en comparación con el mismo período de 2013. La razón de la caída es simple: se compara un período el que estaba en marcha la prohibición con uno de comercio sin esa restricción.

Sin embargo, al contrastar los tránsitos de 2015 (segundo año con la prohibición) con los de 2013 se ve que el resultado cambió, ya que se produjo un aumento de los transbordos de 7,8%. Es decir, los tránsitos crecieron a pesar de estar en vigencia la resolución 1108 y, aunque sea solamente comparando volúmenes, el Puerto de Montevideo pudo revertir el efecto negativo de la medida argentina.

El movimiento de contenedores en el recinto portuario es realizado básicamente en partes iguales- por Terminal Cuenca del Plata (TCP, conformada mayoritariamente por la multinacional belga Katoen Natie con participación del Estado) y Montecon. TCP es la única terminal especializada en contenedores; Montecon utiliza para su operativa los muelles públicos.

El gerente de relaciones institucionales de Katoen Natie, Fernando Correa, dijo a El País que antes de la resolución 1108, TCP movilizaba el 60% de los transbordos que llegaban a Montevideo. Luego de la medida (en 2014) pasó a mover un 35% y en 2015 volvió al 60%. "Se volvió a los niveles de 2013, pero con carga paraguaya que llega en tránsito", indicó Correa.

Por su parte, el gerente general de Montecon, Juan Olascoaga, señaló a El país que a pesar de la importancia de la llegada de mercadería argentina en tránsito "sabíamos que otras cargas podían crecer y que seguramente el tránsito paraguayo iba a mitigar las pérdidas. No solo las mitigó; las logró cambiar".

A pesar de eso, ninguna de las dos compañías se resigna a perder definitivamente los tránsitos de mercadería argentina. "Si vamos a números concretos, sí, se superó el efecto de la 1108. Pero si me pregunto si el Puerto de Montevideo va a basar su sustentabilidad en el tránsito paraguayo creo que no. Se pudo compensar la 1108, sin dudas, aunque prefiero mirar desde la perspectiva de que hay tráficos que Uruguay debería atender y no lo puede hacer", afirmó Correa.

Al respecto, Olascoaga señaló que la carga paraguaya hizo que los tránsitos crecieran en volumen, pero "quizás la contribución de ese volumen no es tanta como en su momento fue la de Argentina". Añadió que los transbordos argentinos pueden ser más rentables por ser mercadería que necesita otros servicios, por ser mercadería perecedera y que debe ser refrigerada. Para el jerarca de Montecon la perspectiva para el año que viene no es la mejor.

"Seguramente el volumen a movilizar sea menor que el de este año, sobre todo de carga local, que es lo que le otorga mayor rentabilidad al puerto", dijo. "Los tránsitos, como dependen mucho más de la economía del país que embarca, quizás se sostengan. Y si se recupera la carga argentina los transbordos van a aumentar", señaló Olascoaga.

Los operadores portuarios esperan que el gobierno de Mauricio Macri deje atrás la resolución 1108 impulsada por la administración de Cristina Fernández, con un claro cometido de perjudicar la actividad portuaria uruguaya. Pero aún eso ocurra en el corto plazo, no será fácil que el Puerto de Montevideo recupere los transbordos argentinos.

"No será de un día para el otro, por más que se levante la restricción. No va a ser fácil que los exportadores argentinos cambien la logística que está implementada con Río Grande del Sur por más que sea más atractivo hacer los tránsitos por Montevideo. Las cosas no cambian tan rápido", expresó Olascoaga.

La resolución 1108 de Puertos y Vías Navegables de Argentina también limitó el tamaño de los convoyes de barcazas que circulaban por la hidrovía rumbo a la terminal de Nueva Palmira. Esa medida también hizo que la actividad en la terminal coloniense se viera perjudicada durante el año pasado. Este año, en los primeros nueve meses (últimos datos disponibles en el instituto Nacional de Logística), los transbordos mostraron un incremento de 32%. En ese sentido, aumentó la llegada en tránsito de soja, maíz, fertilizantes y carbón térmico. Como contrapartida, cayeron los tránsitos de harina de soja, cemento clinker y vehículos, entre otras mercaderías. A su vez, el movimiento de mercadería uruguaya tuvo una baja de 17% en ese período.

A la espera de cambiosMAXIMILIANO MONTAUTTI