Publicidad

“En un mundo con epidemia populista, Uruguay está con defensas bajas”

Compartir esta noticia
En su primera presentación al frente de Ceres, Tolosa no dejó de analizar aspectos políticos. Foto: F. Flores

Guillermo Tolosa, director ejecutivo de Ceres

Luego de 21 años bajo la impronta de Ernesto Talvi —dejó su cargo en junio para lanzarse como pre-candidato por el Partido Colorado—, Ceres tuvo su primera conferencia con su nuevo director ejecutivo. Guillermo Tolosa dejó mensajes y advertencias.

Ernesto Talvi fue por 21 años director ejecutivo del Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (Ceres) hasta que dejó el cargo en junio para ser precandidato presidencial por el Partido Colorado. Su reemplazante es Guillermo Tolosa, doctor en Economía que trabajó varios años en el Fondo Monetario Internacional (FMI), quien pese a marcar matices desde su primera disertación continuó el tono de su antecesor con análisis con una pata en la economía y otra en los procesos políticos.

Apelando a una frase de la canción Burbujas de La Vela Puerca —"a este mundo jodido ya le sale pus"—, Tolosa dijo que "nos transmiten que el mundo está mal" cuando los indicadores muestran lo contrario: el ciudadano promedio tiene el ingreso per cápita más alto de la historia, caen la desigualdad y la pobreza extrema en el mundo, se duplicó el número de personas alfabetizadas desde la posguerra, la venta mundial de libros es récord y la esperanza de vida está en aumento, entre otros datos económicos, ambientales y sociales que presentó.

Emulando al presentador televisivo Jorge Traverso, el director de Ceres sostuvo: "Así está el mundo amigos, cada vez más próspero, saludable y pacífico". Este progreso global lo atribuyó al orden establecido tras las guerras mundiales, con foco "en la integración del comercio mundial" y el multilateralismo, la libertad y la consistencia en las decisiones políticas.

"Si tomáramos al mundo como un solo país, su presidente sería reelecto por los resultados. Sin embargo, lo más cercano a esa figura hoy día es Donald Trump", alguien que llegó al poder como un antisistema que venía a acabar con los manejos políticos de antaño, planteó Tolosa.

En esa línea, subrayó que el antiguo orden fue reemplazado en la actualidad por el populismo —"aunque el mundo va bien, el populista nos convence de patear al tablero"—, que se basa en la imposición de barreras al comercio y la inmigración, el impulso del bilateralismo y la imprevisibilidad.

En su primera presentación al frente de Ceres, Tolosa no dejó de analizar aspectos políticos. Foto: F. Flores
Foto: F. Flores

Dentro de este último grupo posicionó tanto a Trump como al nuevo mandatario brasileño Jair Bolsonaro, pasando por el turco Recep Tayyip Erdogan, la expresidenta argentina Cristina Fernández y el excanciller británico Boris Johnson (impulsor del Brexit).

A la interna de los populistas, distinguió entre los de izquierda que suelen atacar al comercio y los empresarios, de los de derecha que apuntan a los inmigrantes u otras minorías raciales, a las élites políticas o la burocracia estatal.

Este tipo de gobiernos según Tolosa se caracterizan por construir un enemigo potente al que dañar a través del discurso y las acciones, imponen una visión fatalista de la realidad, buscan una "parálisis democrática" y el "desmantelamiento institucional", e implementan "políticas distorsivas" que priorizan el corto plazo por sobre planes de largo aliento.

El director de Ceres mencionó la guerra comercial de Estados Unidos y China como un retrato de este nuevo mundo, y subrayó que se trata del "peor escenario para países chicos que dependen del comercio, como Uruguay".

¿Cómo debe actuar el país ante este nuevo orden? El economista que fue representante del FMI en varios países señaló que se debe aplicar una receta ortodoxa pero con más cuidado y compromiso por el contexto global —lo comparó con los médicos que siempre dicen "come bien" ante cualquier consulta, pero "si tenés 45 años y colesterol alto eso se vuelve más importante"—. Esa fórmula tiene como pilares la cautela fiscal, una agresiva política de negociación comercial y el impulso de un buen clima de negocios.

Tomando el ejemplo de Trump, que aprovechó la desconfianza en los políticos y conquistó votantes con baja formación educativa, Tolosa advirtió que Uruguay sufre de manera incipiente varios problemas que podrían tener impacto electoral: deserción estudiantil, robotización que desplaza a muchos trabajadores, caída en la confianza hacia el gobierno, los partidos políticos y la democracia.

Donald Trump. Foto: EFE
Donald Trump. Foto: EFE

Asociado a los problemas en la enseñanza, marcó que "estamos generando gente que no podrá adaptarse al mundo tecnológico y que nunca tuvo cultura de trabajo", un público que definió "como un caldo de cultivo" para la llegada al poder de un líder populista. "En un mundo donde parece haber una epidemia populista, Uruguay tiene las defensas bajas", concluyó Tolosa.

Un Uruguay con dos caras y el debate polarizado

Tolosa contó que tras más de una década en el exterior volvió a Uruguay y le sorprendió "lo complicado que es el debate". Esa "polarización" de los discursos la atribuyó a que existen "dos caras" de Uruguay: por un lado hay indicadores que nos muestran como el país con mayor PIB per cápita de América Latina o la mejor democracia, pero otras mediciones en formación educativa o seguridad nos dejan en mala posición. "Somos un país de contrastes", dijo. Desde Ceres aclaró que llamará a no ser complacientes ni fatalistas en los análisis.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad