UAM

Como base de una ensalada, acompañado con una milanesa, en un ´plato de pasta o incluso rellenos, el tomate es uno de los alimentos más consumidos en la mesa de los uruguayos, y actualmente el kilo cuesta en el entorno de los $ 200. Su alto precio responde a la pérdida de producción en este invierno, explicó Pablo Pacheco, jefe del área de información de Mercados de la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM), quien también adelantó una "buena noticia" para los próximos días.

El tomate es la segunda hortaliza más consumida en Uruguay después de la papa, y una de las cinco frutas y hortalizas de mayor consumo en el país, grafica Pacheco. "Eso hace que sea un producto especialmente sensible, no solo por el lado más tecnico en el sentido que pondera mucho en el IPC (Índice de Precios al Consumo), sino que también pesa mucho en la opinión de la gente porque es un producto que estamos acostumbrados a tener todos los días, y a un precio relativamente accesible", dijo.

El incremento en este caso se percibe de forma "espectacular" porque el tomate ha venido mostrando precios bajos "durante un período muy prolongado, incluso bastante por debajo de la expectativa histórica de precios", añadió.

El abastecimiento de tomate en la UAM —que concentra gran parte de producción del país— proviene de distintas zonas del país de acuerdo a la temporada del año. Entre diciembre y mayo, aproximadamente, la producción proviene mayormente del sur del país, mientras que en los meses siguientes —invierno y primavera— la producción viene del litoral norte en mayor medida.

¿Qué pasó en esta oportunidad? La oferta, que proviene principalmente de los invernáculos de Salto, se vio perjudicada por los fríos y la nubosidad de este invierno. "En el período de los meses de junio y julio, sobre todo, se dieron muchos días con muy poca insolación -una de las ventajas del norte- y las condiciones de alta nubosidad perjudicó el proceso de polinización y cuajado de las flores de tomates, y eso es lo que está faltando ahora", explicó.

En setiembre de 2021, ingresaron a la UAM 2.085 toneladas de tomate, mientras que en setiembre pasado fueron 1.089. Esta falta de oferta derivó en un pronunciado aumento de su precio.

"Con respecto al precio promedio histórico de tomate en setiembre estamos 70% arriba; respecto a setiembre del año pasado 145% más y con respecto al mes pasado (agosto) estamos 124% arriba", grafica Pacheco, respecto a los precios mayoristas que releva la UAM.

"Todos los días en la UAM tenemos a 500 operadores mayoristas ofertando productos y más 7.000 comprando, de los cuales unos 2.500 vienen con mucha frecuencia a la UAM, como feriantes o puesteros", indicó Pacheco. En este escenario, los que pueden colocar el tomate aunque sea a un precio alto, pujan para comprar el producto escaso, lo que genera una suba.

El precio del tomate fue el que presentó la mayor variación en setiembre (103,34% a nivel minorista), dentro del subgrupo de Legumbres y Hortalizas, que llegó a 13,31% en el mes pasado, de acuerdo al informe del Instituto Nacional de Estadística (INE). El Índice de Precios del Consumo (IPC) subió 0,84% en septiembre y la inflación en los últimos 12 meses marca el guarismo más alto desde julio de 2020 bordeando el 10%.

En el mercado ubicado a las afueras de Montevideo, principal del país, se comercializan en planchas de unos 10 kilos, que para el caso del tomate redondo calibre grande se vende a unos $ 1.600. "Son precios muy altos para el tomate, pero tiene que ver con que estamos en niveles de oferta que son prácticamente la mitad de los que había a la misma altura del mes pasado", remarcó Pacheco.

En este panorama desalentador, Pacheco adelantó una "buena noticia" para los próximos días. "Los racimos que estaban cuajando en junio y julio, se perdieron, pero los racimos de fines de agosto y setiembre están bien. Entonces, la misma planta ya están con mucha fruta que está verde, pero que en breve va a estar madurando", dijo el especialista.

Esto va a derivar de que "a partir de unos diez días va a haber una normalización en los niveles de ofertas de tomate", lo que va a generar una "tendencia a la baja muy marcada" de su precio.

"Hay mucho cultivo instalado con mucha carga de fruta que le falta unos días para empezar a madurar", insistió. Si se alcanza una producción por encima de 350 toneladas semanales, la plancha de 10 kilos de tomates pasaría de unos $ 1.600 a unos $ 500, estimó.