AUMENTO DE PRECIOS
El indicador se redujo con respecto a octubre del año pasado, cuando fue del 0,45%, favorecido por la caída de los precios de la energía.
La inflación de Brasil presentó el mes pasado la menor tasa para octubre desde 1998 al situarse en el 0,10%, frente a la deflación registrada en septiembre (-0,04%), informó este jueves el gobierno.
El indicador se redujo con respecto a octubre del año pasado, cuando fue del 0,45%, favorecido por la caída de los precios de la energía, señaló el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
En los diez primeros meses de 2019, la inflación acumula una suba del 2,6%, mientras que en la comparación interanual se ha situado en un 2,54%.
Los precios de los alimentos y bebidas se mantuvieron estables (0,05%) en octubre comparados con el mes anterior, mientras que los de la vivienda bajaron un 0,61%.
La inflación en los sectores textil, salud y transporte aceleró más en octubre, con porcentajes del 0,63%, 0,40% y 0,45%, respectivamente.
Brasil terminó 2018 con una inflación del 3,75%, dentro de la meta establecida por el gobierno, que era del 4,5%, con un punto y medio porcentual de margen para arriba (6%) o para abajo (3%).
La meta para este 2019 es de 4,25%, con el mismo margen de tolerancia que el del año pasado.
Según analistas consultados por el Banco Central, los precios cerrarán 2019 con una subida en torno al 3,29%, reflejo de los débiles índices de consumo interno de las familias en Brasil.
La mayor economía de Sudamérica aún se recupera de la profunda recesión registrada entre 2015 y 2016, período en que el Producto Interno Bruto (PIB) se desplomó siete puntos porcentuales.
La tasa de desempleo continúa estancada en el 11,8%, equivalente a 12,5 millones de personas sin trabajo.
Tras las dos últimos años con un crecimiento raquítico del 1%, el gobierno y el mercado financiero proyectan que para este año el PIB brasileño crecerá entre un 0,8% y 0,9%.