Hoy puedo confirmar que los planes de gasto público fijados para los próximos cuatro años tienen previsto generar ese superávit", dijo el ministro de Finanzas, George Obsorne.
El ministro de Finanzas británico, George Osborne, sorprendió a sus críticos al aferrarse a su objetivo de superávit presupuestario para el final de la década, incluso a pesar de que abandonó un polémico plan para obtener grandes ahorros en una parte destinada al estado del bienestar.
Osborne dijo el miércoles al Parlamento que busca un superávit de 10.100 millones de libras para el año financiero 2019/20, algo más que el objetivo previo anunciado en julio. También afirmó que pretende tomar prestado menos en el actual año financiero que lo estimado en julio.
"Estamos comprometidos a obtener un superávit", dijo. "Hoy puedo confirmar que los planes de gasto público fijados para los próximos cuatro años tienen previsto generar ese superávit, para que no tengamos que tomar prestado para siempre y podamos estar preparados para cualquier tormenta que venga".
Osborne atribuyó la mejora del panorama de las finanzas británicas a las previsiones de crecimiento ligeramente más altas para los dos próximos años y unos costos de la deuda por debajo de los estimado inicialmente, ya que el rendimiento de los bonos gubernamentales británicos se mantienen bajos.
Convertir el déficit presupuestario británico en superávit fue una de las principales promesas del primer ministro, David Cameron, a los votantes en las elecciones de mayo y, si lo logra, ayudaría al Partido Conservador gobernante a rebajar los impuestos a los ingresos antes de las próximas elecciones, previstas para 2020.
Osborne, que es uno de los principales aspirantes a suceder a Cameron, anunció el abandono de una de sus ideas para lograr grandes ahorros, la rebaja de los créditos fiscales a los hogares de menores ingresos. La propuesta provocó una inusual rebelión en la Cámara alta del Parlamento el mes pasado.
"Al poder anunciar hoy una mejora de las finanzas públicas, lo más sencillo no es introducir gradualmente estos cambios, sino suprimirlos por completo", señaló.
REUTERS