Publicidad

FMI y BM dicen que América Latina "agotó" espacio fiscal

Compartir esta noticia

El espacio fiscal en América Latina se agotó cuando la desaceleración económica es de carácter "permanente" y se necesitaría contar con márgenes de maniobra, a lo que se suman riesgos por el lado de la deuda acumulada en dólares de varios países y empresas.

Esa visión fue compartida ayer en diversas presentaciones de jerarcas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), en las denominadas Reuniones de Primavera que realizan ambos organismos en Washington. Para Uruguay, la situación es similar aunque sin las urgencias que tienen otros países.

De hecho, el economista jefe para América Latina y el Caribe del BM, Augusto de la Torre dijo a El País que en la economía uruguaya no son necesarios "grandes reajustes" en ese plano.

De la Torre hizo una presentación del reciente informe del organismo: "América Latina recorre un estrecho camino al crecimiento: La desaceleración y sus retos macroeconómicos". Describió a este enlentecimiento como "agudo" e "inesperado" y "más pronunciado que en otras regiones de mediano ingreso".

Según el economista, "el fin del gran ciclo de China" y de las "materias primas" está detrás de esto, pero el shock sobre la región se amplificó debido a que "la inversión reaccionó (disminuyendo) muy fuertemente".

Además, por creer que este era un fenómeno transitorio, los países de la región "incrementaron el gasto, a pesar de que los ingresos estaban cayendo", pero el desacelere "es permanente y se nos agotó el espacio fiscal", afirmó De la Torre.

En la presentación del Reporte Global de Estabilidad Financiera y del Monitor Fiscal del FMI, se mencionaron estos aspectos. Sobre los mercados emergentes (dentro de los que el Fondo incluye a Uruguay) se enfatizó que la "volatilidad financiera y menores precios de exportación tensionan los amortiguadores fiscales que ya eran delgados" y a que el endeudamiento "está bien por encima de los niveles pre-crisis y eso va a apretar el espacio de política fiscal en el futuro".

Respecto a la situación financiera, el Fondo ve un "incremento del riesgo" en América Latina por el lado de la deuda en dólares que tomaron varias compañías de la región (ver aparte).

¿Qué hacer?

En el FMI predomina la visión de fortalecer los marcos fiscales en América Latina, mediante reglas que permitan ahorrar en los tiempos de bonanza y así enfrentar "las subas y bajas que inevitablemente vienen por ser un productor de recursos", dijo el director del Departamento de Asuntos Fiscales del organismo, Vitor Gaspar.

Asimismo, el jerarca destacó que la caída de precios del petróleo, representa una "oportunidad de oro" para reducir o eliminar subsidios energéticos y elevar los impuestos a los energéticos.

Para el economista jefe del Banco Mundial son necesarias "reglas fiscales a la Chile", es decir generar con los ingresos transitorios "fondos de estabilización o incluir estabilizadores (del gasto) automáticos".

Para Uruguay, sin embargo, las prioridades deberían ser otras. En diálogo con El País, De la Torre dijo que "no" ve a "Uruguay como país donde los problemas macroeconómicos dominan. Creo que el manejo macroeconómico ha sido normalmente bastante sano. El patrón de crecimiento fiscal ha sido manejado en una sociedad en donde hay muchas demandas sobre el gobierno, pero también la sociedad está dispuesta a contribuir con el gobierno. Entonces, Uruguay es un país donde como porcentaje del PIB gasta más, pero también como porcentaje del PIB recauda más".

El funcionario del BM agregó: "por decirlo de alguna manera, el pacto social en Uruguay espera que el gobierno dé muchos servicios públicos: para la vejez, para la educación, para la salud, pero la población al mismo tiempo está dispuesto a pagar por ellos" (vía impuestos).

"No veo (necesidad de) grandes reajustes macroeconómicos" en el país, dijo De la Torre y añadió que "hay un elemento que sí es limitante en Uruguay, que es que como Perú, tiene un grado de dolarización relativamente alto. Entonces no es un país que puede darse el lujo de grandes fluctuaciones de la moneda. Tiene flexibilidad cambiaria, pero más acotada que la que tienen Colombia, México o Brasil".

A su juicio, "el gran dilema de Uruguay gira en cómo sostener el tipo de crecimiento que ha venido experimentado en estos años, que se despertó cuando Uruguay encontró nuevos mercados, especialmente China, lo que generó una gran modernización del sector agrícola, donde se elevó la productividad de manera muy alta".

Y dijo que "hay una serie de temas que se discuten en Uruguay que deberían estudiarse un poquito más a la luz de esta gran visión".

Ejemplificó que "la educación, que es el tema central de debate en Uruguay, que pese a su gran avance en ingreso per cápita tiene una tasa de abandono del colegio secundario muy alta y la reforma educativa que se discute está asociada a esta fenomenología de problemas en educación secundaria que luego limitan la educación terciaria".

Prepararse para la suba de las tasas en EE.UU.

El director del Departamento Monetario y de Mercados de Capitales del Fondo Monetario Internacional (FMI), José Viñals dijo ayer en conferencia de prensa que los países emergentes "tienen deberes para hacer" en "prepararse" para una suba de tasa de interés en Estados Unidos "no tan suave como pensamos en nuestro escenario base". La Reserva Federal de Estados Unidos mantiene desde hace seis años las tasas en niveles históricamente bajos (0%-0,25%) y ha señalado que las subirá, aunque aún no anunció cuándo ni cómo. Por eso Viñals afirmó al presentar el Reporte Global de Estabilidad Financiera del Fondo ayer en Washington- que es clave que los países se preparen como si la suba fuera fuerte de entrada, mediante el fortalecimiento de los fundamentos macro-financieros y contar con espacio de maniobra para políticas contra-cíclicas. De esta forma, si la suba finalmente es "suave" podrá ser "manejada más fácilmente" por los países emergentes, añadió el jerarca del organismo internacional.

La deuda en dólares, un riesgo latente.

El subjefe de División del Departamento Monetario y de Mercados de Capitales del FMI, Chris Walker dijo ayer en la conferencia de presentación del informe de Estabilidad Financiera que "la exposición a la deuda en dólares es sustancial" en América Latina. En eso ve un "incremento en los riesgos" ya que en un "número de países, las corporaciones han aumentado el monto de los préstamos en dólares en los últimos años con intereses más bajos". Particularmente, el reporte menciona a Brasil como uno de los países con "altos porcentajes de deuda corporativa en riesgo". Dado que en Uruguay operan varias empresas brasileñas de gran porte, El País consultó a Walker al respecto. El funcionario dijo que "los riesgos son en empresas específicas que sufren la caída en el precio de los commodities, así como alta exposición al dólar. Eso se ha trasladado al costo de la deuda corporativa. Más allá de eso, creo que el mercado está respondiendo como debe en esos casos, no creo que haya que preocuparse más que eso".

Walker señaló además a El País que "en los casos de alta deuda corporativa en dólares, las autoridades" uruguayas "deberían estar preocupadas sobre la exposición externa, monitoreando (la situación) y en caso de ser necesarias, las medidas marcoprudenciales son importantes". Para eso es clave que las pruebas de tensión que se realizan sobre los bancos incorporen qué tan expuestos están a las empresas que están endeudadas en dólares, explicó.

Por otro lado, Walker añadió que "tomar medidas (específicas) sobre la exposición al dólar (de las empresas) es difícil". Por eso es importante contar con "fuertes marcos macroeconómicos" y "tipos de cambio flexibles".

Uruguay no está entre los peores; debe enfocarse en cómo seguir creciendoFABIÁN TISCORNIA

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad