Publicidad

Ahora el euro: la turbulencia "por barrios" y el efecto local

Compartir esta noticia
El riesgo cambió de zona, de América Latina (particularmente Argentina) se trasladó a Europa (Italia principalmente). Foto: AFP

LOS ANTISISTEMA EN ITALIA

La divisa se desplomó por crisis en Italia; hay tranquilidad en Uruguay.

Si hace un par de semanas fue Argentina, ahora es el euro. La turbulencia cambia de barrio, pero pega en los mercados financieros por igual. Uruguay se ha visto afectado (suba del dólar mediante) pero cuenta con ciertos amortiguadores para hacerle frente.

Ayer los inversores apostaron por activos de refugio, debido a que la agitación política en Italia (imposibilidad de formar gobierno y riesgo de salida de la Unión Europea) generó temores de una nueva crisis, lo que hizo subir al yen japonés e impulsó al dólar estadounidense a un máximo de 10 meses contra el euro. El dólar se apreció a su mayor nivel contra el euro desde julio de 2017 a US$ 1,1506, después de una liquidación en el mercado de deuda de Italia.

A su vez, el euro se debilitó contra el franco suizo y el yen japonés, divisas consideradas como refugio seguro. Tocó un mínimo de nueve meses contra el franco a 1,1367 euros y de 10 meses contra la moneda japonesa a 124,61 yenes.

En la Bolsa de Nueva York, el índice S&P 500 y el promedio industrial Dow Jones sufrieron ayer sus mayores caídas porcentuales diarias en un mes, de 1,15% y 1,58% respectivamente. En Europa, el índice paneuropeo STOXX 600 cayó un 1,4%.

El socio de Deloitte, Pablo Rosselli dijo a El País que "desde febrero estamos observando un contexto de volatilidad en los mercados financieros internacionales, que ha estado propiciado por la expectativa de un mayor endurecimiento de la política monetaria en Estados Unidos y por los riesgos de "guerra comercial" entre EE.UU. y China. A ese contexto en estos días se suman los temores por la situación política en Italia".

Eso llevó a "cierta retracción de capitales desde las economías emergentes, con el consiguiente incremento de las primas de riesgo de estas y el debilitamiento de sus monedas frente al dólar, explicó Rosselli.

Para Santiago Rego de CPA Ferrere, "en la medida que esta inestabilidad se mantenga puede cambiar la óptica del riesgo global, impulsando un flight to quality (vuelo hacia la calidad) hacia activos seguros (algo de esto es lo que vimos ayer con la corrección de los rendimientos de bonos en EE.UU. y Alemania). Sin embargo, aún es pronto para decir que esto es una nueva tendencia".

"En la medida que un flight to quality se mantenga puede tener implicancias negativas para los emergentes, en especial para aquellos con fundamentos más débiles (por ejemplo Argentina)", agregó.

¿Y Uruguay?

Uruguay no escapa a ese contexto, "que es particularmente importante en la región dadas las fragilidades que se advierten en Argentina y Brasil. Por esa razón, hemos visto en Uruguay una corrección cambiaria significativa en las últimas semanas", señaló Rosselli.

De hecho, desde el 20 de abril la moneda estadounidense ha aumentado 10,65%.

"Siempre es muy difícil hacer proyecciones de tipo de cambio pero si este fortalecimiento del dólar en el mundo y en la región continuaran, podríamos ver nuevas subas en nuestro país", agregó Rosselli.

El socio de Vixion Consultores, Aldo Lema dijo que "en el corto plazo quita algunos de los mayores impulsos que la economía había recibido desde mediados de 2016: desde fuera de la región el debilitamiento global del dólar y su efecto positivo en flujos de capitales, lo que se amplifica por los problemas de Argentina y Brasil, cuyos crecimientos se moderarían. En una perspectiva más larga, hacia 2019-2020, aumenta la incertidumbre y la probabilidad de los escenarios negativos".

¿Qué tiene Uruguay para hacer frente a estas turbulencias?

Una "fuerte posición de reservas y un adecuado perfil de endeudamiento, lo cual constituyen fortalezas importantes para este contexto", afirmó el socio de Deloitte.

Indicó que esta situación "refuerza con mucha claridad la idea de que no hay espacio para nuevas expansiones del gasto público y de que tampoco hay espacio para aumentos del salario real. Así, la Rendición de Cuentas no debería incorporar gastos adicionales y el gobierno debería orientar la negociación salarial de forma que las empresas y sindicatos se ajusten estrictamente a las pautas. Si el empleo es prioritario, no debería haber aumentos del salario nominal mayores al 7,5% (que es la proyección de consenso de inflación)".

En esa línea, Lema afirmó que "el gobierno tiene que ser convincente y creíble respecto a la consolidación fiscal y el consiguiente cumplimiento de las metas de déficit para 2018 y 2019. Eso exige máxima prudencia en las últimas Rendiciones de Cuentas de este mandato para evitar un cambio en la perspectiva de la deuda y acotar el alza en su costo de financiamiento".

Por su parte, Rego enfatizó en que "más allá de estos episodios, Uruguay va a enfrentar un escenario financiero global más complejo para el cual es importante prepararse, en particular en materia fiscal. Esto a su vez es clave dado que la sequía, y las turbulencias en Argentina van a tener impacto en el crecimiento y, por ende, en la recaudación".

El economista de la consultora Oikos, Pablo Moya dijo a El País que "el gobierno estará expectante en la medida que estos efectos no impactarían mayormente; en todo caso vigilará que no exista una mayor volatilidad en la plaza financiera, y poco más", agregó. CON INFORMACIÓN DE REUTERS

Dólar baja y MEF coloca deuda

El dólar interbancario bajó 0,16% ayer a $ 31,148. La suba de la divisa en mayo se redujo a 8,92% y en el año a 8,29%. En el Banco República el dólar cayó y cerró a $ 30,40 (compra) y a $ 31,80 (venta). En Brasil la divisa estadounidense subió 0,28% y en Argentina aumentó 0,81%. En tanto, el Ministerio de Economía colocó deuda en Unidades Indexadas (UI) por 762,23 millones de UI (US$ 94,6 millones) a 3,6% y con vencimiento en 2030. Licitó 500 millones de UI (US$ 62 millones) y la demanda lo triplicó: 1.595,73 millones de UI (US$ 198 millones). Mientras, el Banco Central declaró desierta una licitación de Letras a dos años por $ 1.800 millones, con una demanda de apenas $ 882,9 millones, al no querer pagar tasas por encima del 10%.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad