La constructora española Abengoa (Teyma en Uruguay) se aproxima al mayor concurso de acreedores en la historia de ese país, después de la ruptura de un acuerdo comercial con Gonvarri, filial del grupo Gestamp (dedicado al diseño, desarrollo y fabricación de componentes metálicos para automóviles).

Abengoa explicó que "continuará el proceso de negociación con sus entidades acreedoras con la finalidad de alcanzar un acuerdo que garantice la viabilidad financiera de la misma al amparo del artículo 5 bis de la Ley Concursal, que es intención solicitar a la mayor brevedad", según publicó El País de Madrid.

Abengoa va en camino a ampararse al preconcurso de acreedores que, de confirmarse, se convertiría en el mayor de la historia de España. La constructora tiene una deuda bruta acumulada de 8.903 millones de euros, según recientes cuentas publicadas hace 15 días correspondientes al tercer trimestre.

Aparte, tiene pendiente una deuda con proveedores de 5.469 millones de euros y su pasivo total, sin tener en cuenta los fondos propios, alcanza los 24.740 millones de euros.

Además, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) decidió ayer "suspender cautelamente, con efectos inmediatos" la cotización de Abengoa en la Bolsa luego que Gestamp decidió dejar sin efecto el acuerdo.

En Uruguay, Teyma (la filial de Abengoa) tiene varias concesiones de obras en sus manos. Entre otras, está la construcción del Antel Arena para el que el gobierno conformó un fideicomiso de US$ 58 millones. También tiene la construcción del puerto pesquero de Capurro que supone US$ 93 millones y la cárcel por PPP en consorcio con Inabensa y Goddard por US$ 90 millones. Además, está acusada por otros empresarios de cobrar sobreprecios en una planta de etanol de ALUR.

En Uruguay, su filial Teyma tiene varias obras con el Estado