Avanzan los proyectos junto con los buenos deseos, como así también el firme propósito de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU).

Estamos hablando de la voluntad de ambos países, Argentina y Uruguay, de ir a la recuperación de la navegación del río Uruguay y con ello la reactivación de los puertos de ambos litorales, y a través de ellos incrementar bocas razonables por donde canalizar el comercio exterior mediterráneo de ambos países que no es poco. De esa voluntad hace ya tiempo expresada en acuerdos surgieron planes conjuntos para profundizar obras de dragado estratégicamente seleccionadas que incluyen los famosos cuatro pasos, canal de entrada al puerto de Concepción del Uruguay, la traza que de aquí va a Paysandú y el acceso y salida desde Paysandú al sur por el famoso canal Casa Blanca, pegado a la costa uruguaya y que acorta distancias para arribar a dicho puerto, que es autodragable por la propia corriente.

Sobre el tema consultamos este fin de semana al Cap. Gastón Silberman, presidente de la delegación uruguaya a la CARP, quien con algunas observaciones se mostró satisfecho de los logros alcanzados hasta ahora. “Estamos contentos por haber hecho el dragado de profundidad hasta Fray Bentos a 25 pies, más uno o dos pies de revancha bajo la quilla; esto es realmente un logro valioso. En otros aspectos hemos tenido situaciones adversas o bien por los recientes aluviones que nos inundaron algunos pasos, o por falta de dragas argentinas de corte que no acudieron a sus cometidos para actuar sobre los pasos duros, uno de los cuales sufrió desperfectos. Es así que la CARU decidió llamar a licitación para el dragado y balizamiento del Paso Montaña (km 16 al km 170,1 entre Concepción y Fray Bentos), y el Paso Casa Blanca (km 196,6 al km 200,3) del río Uruguay, incluyendo el canal de acceso a Concepción. En suma son áreas de fondos fluviales duros pero limitados, apenas unos 7 kilómetros en total, donde se estima extraer algo así como un millón de metros cúbicos que se trataría de arcilla dura. La apertura de esta licitación tendrá lugar el 16 de mayo, así que hasta esa fecha, una hora antes, se reciben ofertas de interesados. Según el Cap. Silberman se sabría ya de dos empresas interesadas y de otras dos que habrían prometido participar.

Nuestro entrevistado nos dice que son obras que se encuentran comprendidas en el “Proyecto de Dragado de Profundización y balizamiento del río Uruguay”, que incluye el canal de acceso al puerto de Concepción, Paysandú y Fray Bentos.

Más adelante Silberman expresa su preocupación o inquietud por la lentitud del plan de dragados, aunque, felizmente, no es por falta de interés en tales obras, sino porque las dragas de los institutos competentes de ambos países están con otros cometidos o se encuentran en reparaciones. Los medios son escasos o precarios, pero seguimos avanzando con seriedad aunque a menor ritmo en los proyectos del río Uruguay.

La otra novedad que nos trajo nuestro entrevistado, la que realmente nos sorprendió, es que en el “Paraná Bravo”, un brazo del río Paraná que desemboca en el río Uruguay, curiosamente hubo problemas por falta de agua, al extremo que está afectando la salida de los barcos desde Nueva Palmira, ya que no lo están haciendo a 34 pies sino a 28, y algunos ya quedaron varados (1).

Tanto las autoridades argentinas como uruguayas están bien informadas del suceso, y han mostrado su preocupación estudiando soluciones inmediatamente, lo cual demuestra que se ha instalado un magnífico canal de comunicaciones entre ambos países. “Esperamos entonces con optimismo que de la parte de Argentina haya una más rapida y concreta respuesta a estos temas del río Uruguay”.

1) Por nuestra parte agregamos que de acuerdo con el sistema de peajes del Martín García, el tramo Uruguay paga una alta cuota para mantener dragado el Paraná Bravo, donde siempre hay agua y no se draga, y ahora nos encontramos con que no hay profundidad.

Lento dragadoEmilia Cazalá