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El dólar en Argentina y la calma explicada

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En el año, el BCU estuvo muy activo y compró US$ 1.998,2 millones y vendió US$ 579,5 millones. Foto: Reuters
En la imagen billetes de 100 dólares en el banco OTP en Budapest. 23 de noviembre 2011.Emisores de mercados emergentes recaudaron la suma récord de 181.000 millones de dólares en bonos globales durante el primer trimestre del 2017, donde la deuda corporativa y la soberana superaron niveles alcanzados previamente, mostraron datos del banco JPMorgan.REUTERS/Laszlo Balogh EMERGENTES-BONOS-EMISIONES
© Laszlo Balogh / Reuters

EFECTOS

Las entidades dicen que la caída está influida por un efecto distorsivo.

El campo dio la primera señal de que el aporte decisivo para que se prolongue la pax cambiaria, que lleva 65 días, y se vea si esto es solo un veranito en pleno invierno o algo más, no provendrá del propio sector, sino de la política.

Es un indicio que, más que sorprender, debería confirmar presunciones, pero también es cierto que hasta ahora se descontaba que a esta altura del año habría un aporte en teoría menos incierto que el político: el ingreso fluido de “agrodólares”, las divisas que generan las exportaciones agropecuarias. La suposición se basaba en que el campo viene de dejar atrás la sequía, que tiene ahora una cosecha récord y que esta es la época del año en la que se acelera la liquidación de divisas.

En abril y mayo el agro estuvo inyectando dólares en el mercado a un ritmo superior al de igual período de 2018, pero el último dato de liquidaciones publicado esta semana por la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) muestra que en junio pisó el freno: fueron US$ 2.218 millones, un 42% menos que en junio de 2018.

Las entidades dicen que la caída está influida por un efecto distorsivo: hace un año “se adelantó el ingreso de divisas para contribuir a combatir la inestabilidad cambiaria que se registraba entonces”. Una forma light de referirse a las presiones que recibieron del exministro de Finanzas, Luis Caputo, y de Hacienda, Nicolás Dujovne, para que volcaran más dólares al mercado tras el segundo pico de la crisis cambiaria, a fines de mayo de 2018. Hasta el propio Mauricio Macri se involucró en el tema. Gustavo Idigoras, presidente de Ciara y el CEC, dice que las cifras hoy, en cambio, “reflejan el nivel de ventas real del productor argentino”. Fuentes del sector confirmaron a La Nación que las liquidaciones arrancaron julio con la misma tendencia declinante.

La liquidación de divisas está relacionada con la compra de granos a los productores que luego serán exportados ya sea en su mismo estado o como productos industrializados. Por lo tanto, juegan otros factores, como los bajos precios internacionales de los granos. “El de la soja hoy es un precio geopolítico difícil de descifrar. Depende más de un tuit de (Donald) Trump que de la oferta y la demanda del mercado”, explica. Entran montos más bajos más allá de los volúmenes.

Pero, los dólares que ingresa el campo explican solo el 50% de la pax cambiaria. El resto responde a la entrada de fondos para hacer carry trade, a que los inversores globales están más dispuestos a asumir riesgos y a que hay mejor humor local por la mejora relativa de Macri. Durará hasta algunas semanas antes de las PASO. Ahí me imagino toma de ganancias”, estima Leonardo Chialva, analista de Delphos Investment. En el Gobierno siguen el tema expectantes. Falta poco más de un mes para saberlo. [EN BASE A LA NACIÓN / GDA]

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