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Descartan que el ajuste fiscal de Brasil tenga efecto negativo en Uruguay

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Joaquim Levy, ministro de Hacienda de Brasil. Foto: Reuters
En la imagen, el ministro de Finanzas brasileño, Joaquim Levy, llega a su ministerio en Brasilia. 13 de enero, 2015. Cualquier incremento de impuestos que eventualmente se pueda establecer como parte de la iniciativa de Brasil para mejorar sus cuentas fiscales tendrá un "impacto mínimo" en la actividad económica, dijo el ministro de Finanzas Joaquim Levy el martes. REUTERS/Ueslei Marcelino En la imagen, el ministro de Finanzas brasileño, Joaquim Levy, llega a su ministerio en Brasilia. 13 de enero, 2015. Cualquier incremento de impuestos que eventualmente se pueda establecer como parte de la iniciativa de Brasil para mejorar sus cuentas fiscales tendrá un "impacto mínimo" en la actividad económica, dijo el ministro de Finanzas Joaquim Levy el martes. REUTERS/Ueslei Marcelino
UESLEI MARCELINO UESLEI MARCELINO/REUTERS

el paquete de ajuste fiscal que implementará el gobierno brasileño en este año consta de aumentos de impuestos al combustible, las operaciones de crédito financiero y las importaciones, además de recortes de gastos.

Con las subas impositivas pretende una recaudación adicional de US$ 7.782 millones en el año. A eso se suma un recorte de unos US$ 8.560 millones en el presupuesto nacional de 2015, que afectará a los llamados "gastos discrecionales", que implican viajes y otros asuntos considerados "no obligatorios".

Analistas locales y el gobierno entienden que las medidas anunciadas por el ministro de Hacienda de Brasil, Joaquim Levy, no tendrán impacto negativo en Uruguay e incluso serán positivas en el mediano plazo.

Levy anunció que el paquete de impuestos indirectos tiene como objetivo equilibrar las cuentas públicas del país norteño y aumentar la confianza en la economía.

Una de las medidas es el incremento del Impuesto para la financiación de la seguridad social (Cofins), los proyectos de integración social (Pis) y de la Contribución de Intervención del Dominio Económico (Cide) sobre el precio de la gasolina y el diesel.

De acuerdo con Levy, a partir del 1° de febrero la gasolina sufrirá en las refinerías un aumento de 0,22 reales por litro (unos US$ 0,08) y el diesel de 0,15 reales por litro (cerca de US$ 0,05), aunque precisó que el alza no significa que el precio del combustible suba para el consumidor, ya que esa competencia responde a la estatal Petrobras.

El titular de Hacienda también anunció la elevación de la alícuota del Impuesto sobre las operaciones financieras (IOF), que pasará del 1,5% al 3% al año, un valor que será añadido al 0,38% que incide en la apertura de las operaciones de crédito.

El gobierno informó asimismo del aumento del impuesto para la financiación del Cofins y del Pis sobre los productos importados, cuya alícuota subirá de 9,25 % a 11,75%, así como una equiparación de tributos en el sector de los cosméticos.

Levy, quien ya había adelantado que el aumento de impuestos llegaría al plan de ajuste, informó que con este aumento de tributos el gobierno pretende alcanzar el superávit primario de 1,2% del Producto Interno Bruto (PIB) fijado para 2015.

El jerarca sostuvo que las medidas de "equilibrio fiscal" están siendo tomadas con "el objetivo de alcanzar con el menor sacrificio posible la retomada del camino del crecimiento".

Los impuestos ayudarán al gobierno a recaudar una tercera parte de los ahorros que necesita para cumplir las metas de reducción de deuda de este año. "Estas medidas, tomadas en conjunto, deberían alentar a la gente a invertir en Brasil y asumir riesgos", agregó.

El crecimiento de Brasil estimado para 2014 es de 0,3%, a la vez que el Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé el mismo porcentaje para este año.

Mirada local.

Fuentes del gobierno electo dijeron a El País que "en el fondo" las medidas de ajuste anunciadas por Brasil "son saludables" porque lo "disciplinan" en el plano fiscal. Si bien el crecimiento económico en el vecino podría ser menor a corto plazo, para Uruguay "es importante" que Brasil "tenga sostenibilidad en el largo plazo", dijo un informante.

Por su parte, el economista de Deloitte Pablo Rosselli señaló a El País que la magnitud del ajuste que llevará adelante Brasil es relativamente pequeño.

"Desde el punto de vista macroeconómico las medidas van en dirección correcta, porque hay en Brasil un exceso de la demanda interna que se refleja en el alto déficit fiscal y de cuenta corriente", dijo Rosselli.

Es por eso que es "necesaria una moderación de esa demanda interna para que baje la inflación y Brasil pueda tener una mayor competitividad", sostuvo el economista.

Sobre el posible impacto en Uruguay, Rosselli señaló que al ser moderada la magnitud del ajuste en Brasil, las consecuencias también serán de la misma forma a nivel local.

Además, indicó que las medidas ratifican, de alguna manera, la perspectiva de bajo crecimiento de Brasil para este año. Y también que "la política macroeconómica va en la dirección de procurar dejar espacio para un valor más alto del dólar". Eso, para Rosselli, es un dato relevante para Uruguay, porque "nuestra competitividad con Brasil está en niveles bajos y si Brasil continúa en una senda de depreciación del real, en Uruguay también tendríamos una depreciación del peso ", estimó.

A su vez, el economista de Oikos Pablo Moya expresó a El País que la intención del gobierno de Brasil es mantener el grado inversor que ostenta y que las calificadoras de riesgo ponen en duda si mantiene sus actuales números fiscales.

Para Moya, la suba de los impuestos y las alícuotas va a resentir el consumo interno brasileño y como consecuencia las previsiones del PIB para este año.

Aclaró que las medidas anunciadas por Levy tratarán de llevar la inflación al rango meta gubernamental del cual está alejada.

"El gobierno sacrificaría, de esa manera, crecimiento en pos de cumplimiento de la meta inflacionaria y mantener el grado inversor", afirmó Moya.

El economista descartó que las medidas puedan tener efecto negativo en Uruguay. [Con información de EFE y Reuters)

Sin impacto en exportaciones

Las exportaciones a Brasil, uno de los principales socios comerciales de Uruguay, tuvieron un retroceso el año pasado y cayeron 4,6% en la comparación con 2013, según datos de la Unión de Exportadores (UEU). A pesar de eso, el economista Pablo Moya previó que las nuevas medidas anunciadas no tendrán impacto en las colocaciones en el país norteño. "Sí podría tener un impacto global sobre el ingreso de disponible de las familias brasileñas para consumir la globalidad de productos", dijo Moya. Aclaró que las exportaciones hacia Brasil son básicamente bienes alimentarios que son necesarios, al ser parte de la canasta básica y por eso no se deberían resentir. Entre los principales productos que Brasil compró en Uruguay estuvo el trigo.

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Joaquim Levy, ministro de Hacienda de Brasil. Foto: Reuters

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