El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) en Brasil alcanzó su mayor nivel desde junio de 2015, al pasar de los 67,9 puntos registrados en mayo a los 71,3 anotados este mes, según informó en la víspera la Fundación Getulio Vargas (FGV).
Pese a la mejora de las perspectivas, este dato sigue siendo inferior al obtenido en el mismo mes del año pasado, cuando el índice marcaba 12,6 puntos por encima del dato publicado ayer y alcanzaba los 83,9 enteros.
Para la FGV, un importante centro privado de estudios económicos, los consumidores han comenzado a recuperar el optimismo sobre el futuro de la economía, pese a que las últimas proyecciones realizadas por analistas consultados semanalmente por el Banco Central apuntan que el Producto Interior Bruto (PIB) brasileño se contraerá 3,44% este año.
"El resultado general de la encuesta muestra que los consumidores se están volviendo gradualmente menos pesimistas en relación a la evolución de la economía y de las finanzas personales, aunque las condiciones actuales sean muy malas", señaló la fundación. Las previsiones del Banco Central estiman que hasta 2017 no se pondrá fin a la recesión.
MERCADO REGIONAL