Desempleo fue 8,6% en julio, más alto desde 2009; encontrar trabajo lleva más tiempo según consultoras.

La tasa de desempleo en julio se ubicó en 8,6% y alcanzó su mayor valor desde abril de 2009 (8,7%). Los analistas observan que se reaceleró la pérdida de puestos de trabajo en los últimos dos meses, que los desocupados se enfrentan a procesos de búsqueda más prolongados en el tiempo y no esperan que cambie este panorama en el año.

Ayer el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la tasa de desempleo sufrió un aumento de 1,1 puntos porcentuales respecto al mes anterior y de 1,6 puntos porcentuales en comparación con julio del año pasado.

A su vez, en julio la tasa de actividad fue 57,8% y cayó 0,7 puntos porcentuales en relación al mes anterior. En base a estos números, el economista Aldo Lema sostuvo en Twitter que "se reaceleró la pérdida de empleo" en el último bimestre "tras cierta estabilidad entre enero y mayo".

En tanto, la tasa de actividad (63,2%) se mantuvo estable respecto a junio y bajó 0,3 puntos porcentuales respecto a un año atrás. Esta menor participación laboral atenuó levemente la suba del desempleo, indicó Lema.

Por su parte, el economista de la consultora Oikos, Pablo Moya, dijo a El País que "las condiciones del mercado (de trabajo) se han deteriorado y reflejan el actual estado de estancamiento económico".

Hasta el primer semestre de 2016 se habían perdido 17.000 puestos de trabajo respecto a un año atrás y Lema estimó que la cifra ascendió a 20.000 en julio.

Las dificultades que atraviesa el mercado laboral fueron ratificadas por las consultoras de empleo. "En la medida que no hay un horizonte claro de crecimiento, las estructuras (de trabajo) se mantienen estables o si hay rotación no se repone personal", explicó el socio de O+H, Neker de la Llana.

El director de la consultora Advice, Federico Muttoni, expresó a El País que "por ahora estamos lejos de ver una recuperación" de la demanda laboral. En la misma línea se manifestó de la Llana: "Esta tónica creemos va a continuar el resto del año, no hay elementos macroeconómicos que puedan hacer pensar cambios en la tendencia en el corto plazo".

El analista de O+H indicó que el mayor tiempo requerido por los desocupados para acceder a un trabajo es "un elemento que se ha ido acentuando este año" y subrayó que este fenómeno ocurre "a nivel del personal operativo y de profesionales". Agregó que varias empresas están realizando reestructuras "con una postura conservadora para la contratación de personal".

Muttoni coincidió en que la reinserción laboral "se hace más lenta". Atribuyó las dificultades del mercado a "la incertidumbre sobre la coyuntura económica" que existe entre los empresarios, lo que aseguró que "se traslada al empleo directamente".

Hacia el futuro, Moya auguró que 2016 cerrará con una tasa de desocupación arriba del 8%, aunque señaló "factores estacionales" que pueden reducir el dato como las fiestas tradicionales y la temporada turística.

A principio de año, el director nacional de Empleo, Eduardo Pereira, había manifestado a El País que era "un objetivo del gobierno" que el desempleo se mantenga por debajo de 8%.

Por otra parte, el director de Advice señaló que será "fundamental" para el empleo lo que suceda en la ronda de negociación salarial que se inició hace unas semanas y sostuvo que esto puede "estar impactando indirectamente" en el mercado.

Al respecto, Lema apuntó que "la caída interanual del empleo (cercana a 1%) es el reflejo de un aumento similar de los salarios reales".

Muttoni marcó al sector de servicios globales hacia el exterior como un oasis que aún mantiene niveles de crecimiento en el empleo, mientras que de la Llana situó las posibles señales de recuperación hacia 2017 con un proceso de mejora en la región y el comienzo de la instalación de la segunda planta de la empresa UPM.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) informó ayer que en julio la estimación puntual del ingreso medio de los hogares a valores corrientes (sin aguinaldo y sin valor locativo) para el total del país se estimó en $ 52.412. Este valor, resulta $ 1.649 superior a la estimación puntual de junio. En el caso de Montevideo, el ingreso de los hogares a valores corrientes se estimó en $ 60.138, valor superior al calculado para el resto de los departamentos donde se ubicó en $ 46.965.

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