El Banco Central de Brasil se mantendrá vigilante en caso de que los pronósticos de la inflación se alejen significativamente de su objetivo, dijo ayer en una clara advertencia de que podría volver a subir las tasas.

En las minutas de su reunión de la semana pasada, el banco dijo que los avances en su lucha contra la inflación mostraba que la política monetaria iba en la dirección correcta. El banco ha prometido reducir la inflación a la mitad para el año próximo.

El organismo subió la semana pasada su tasa de referencia Selic en 50 puntos básicos por sexta vez seguida, a 14,25%, pero señaló que había detenido el agresivo ciclo de endurecimiento monetario.

En las minutas, el banco reafirmó la pausa en el alza de tasas, diciendo que los encargados de las políticas requerían perseverancia y determinación para bajar la inflación.

"El banco se fijó una barra relativamente alta para volver a subir las tasas de interés", dijo Rodrigo Melo, economista jefe de Icatu Vanguarda. Una depreciación más fuerte del real brasileño podría elevar las expectativas ancladas, dijeron analistas. En el año a la fecha, la moneda se ha debilitado más de un 24% contra el dólar. REUTERS / BRASILIA

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