La Fed tendrá su próximo encuentro el 28 de julio y allí se sabrá si ofrece algún guiño que ratifique las previsiones de un alza de tasas este año.
Las monedas latinoamericanas seguirían afectadas esta semana después de que varios datos de Estados Unidos y las últimas declaraciones de Janet Yellen, la presidenta de la Reserva Federal, reforzaron las expectativas de que el organismo elevará su tasa de interés de referencia este año.
Los precios al consumidor de Estados Unidos aumentaron por quinto mes consecutivo en junio en una nueva señal de un avance de la inflación. Otros datos del viernes también sugirieron que la economía del país podría soportar un endurecimiento de la política monetaria.
En México, los operadores ven un rango de entre 15,68 y 16,05 pesos por divisa estadounidense para los próximos días. La moneda local bajó el viernes pasado al mínimo histórico de 15,9275 por dólar, muy cerca del nivel psicológico de las 16,00 unidades.
El peso registró su tercera jornada consecutiva de pérdidas para acumular la semana pasada una caída del 1,3 por ciento. Pero también existen factores económicos locales que frustran a los activos mexicanos, como los últimos resultados pobres de la gigante de telecomunicaciones América Móvil.
En Brasil, la consultora 4Cast dijo que el real continuaría presionado hacia 3,20 por dólar en la medida que las tensiones políticas empeoren y el mercado considere que está comprometida la capacidad del Gobierno para llevar adelante los ajustes económicos.
El real cayó un 1,13 por ciento a 3,1939 unidades por dólar el viernes. El presidente de la Cámara baja del Congreso brasileño, Eduardo Cunha, anunció que rompía relaciones con el Gobierno, profundizando la crisis política en la mayor economía latinoamericana.
En Estados Unidos, los indicadores programados para esta semana son de orden secundario y los mercados ya concentrarán las miradas en el encuentro de dos días de la Fed que concluye el 29 de julio, para ver si ofrece algún guiño que ratifique las previsiones de un alza de tasas este año.
En declaraciones ante los legisladores, Yellen dijo la semana pasada que el banco central estadounidense necesita asegurarse de no subir las tasas de interés muy tarde, arriesgándose a tener que elevar los tipos a un ritmo más rápido para enfriar la economía.
Grecia sigue siendo un factor de riesgo alto. La canciller alemana, Angela Merkel, dijo el domingo que el Gobierno griego tendrá que aplicar rápido las medidas de ajuste que aceptó a cambio de asistencia financiera. Los bancos de Grecia tenían previsto reabrir pero los controles de cambios permanecerán.
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